Bailleres paga caro su novatez

Reduce el Acuerdo Parlamentario a carta de buena intención.

En su novatada, Bailleres comete dos pifias: recula del Acuerdo Parlamentario y defiende a su compañero de parrandas, Antonio Juárez Acevedo. Trastabilla, al tiempo de evidenciar su ignorancia en el tema de la CAIP.

Selene Ríos Andraca

José Othón Bailleres Carriles, flamante presidente de la Gran Comisión, pagó cara su novatez. La rebelión interna en la bancada priista y órdenes superiores de Casa Puebla lo obligaron a recular del Acuerdo Parlamentario que firmó públicamente con las otras fracciones para rotar la Presidencia de la Mesa Directiva y abrir la posibilidad de que un partido de oposición responda el próximo informe de gobierno.

Para terminar de manchar su unción, Bailleres Carriles exhibió que los compadrazgos se anteponen al respeto al Legislativo y al cumplimiento de la ley, una vez que defendió públicamente al comisionado para el Acceso a la Información Pública, Antonio Juárez Acevedo, su viejo compañero de parrandas de la Libre de Derecho.

Al término de la sesión ordinaria, el también coordinador de la bancada priista ofreció una conferencia de prensa para cometer sus dos primeras pifias: recular del Acuerdo Parlamentario, signado apenas el 10 de enero, y para evidenciar su ignorancia en el caso de Juárez Acevedo.

Se retracta Bailleres

El pasado 10 de enero, Bailleres en compañía de representantes de las bancadas del PAN, PRD, Convergencia, Panal y PT signaron un acuerdo para que se reforme la Constitución y la Ley Orgánica del Poder Legislativo, con el objetivo de que la Presidencia de la Mesa Directiva pueda ser ocupada por legisladores de partidos de oposición.

El Acuerdo Parlamentario fue aplaudido por Eduardo Rivera, líder estatal del PAN. Empero, las glorias ganadas con el pacto entre los partidos se vieron afectadas por las críticas de los diputados priistas y del primer priista en la entidad.

En columnas periodísticas como la de Ricardo Morales de Intolerancia, Bailleres recibió un mensaje de la cúpula gubernamental, pues el texto consignó la molestia de los priistas, quienes no están en ninguna situación incómoda para ceder acuerdos que no beneficien al gobernador Mario Marín Torres.

Ayer, Bailleres redujo lo que él mismo llamó Acuerdo Parlamentario a “carta de buena intención”, al asegurar que la reforma que requiere el pacto tendrá que esperar a que se aglutinen más iniciativas: “para hacer una reforma integral y no parches”.

Según el diputado priista, el único acuerdo que signó con los partidos de oposición fue que la iniciativa panista sería turnada a la comisión correspondiente —Gobernación— para su análisis y estudio.

A decir del legislador, a él no le incomoda que un diputado de oposición sea nombrado el Presidente del Congreso en periodos subsecuentes: “pero habrá que analizarlo primero”. 

El compañerismo
Bailleres-Juárez

Para el nuevo presidente de la Gran Comisión —a diferencia de su antecesor— el hecho de que Antonio Juárez Acevedo, presidente de la Comisión para el Acceso a la Información Pública (CAIP), haya ocultado que es secretario general de la agrupación política nacional Plataforma Cuatro, violentando la legislación local, es un “asunto secundario”.

A Bailleres Carriles —compañero de Juárez Acevedo en la Libre de Derecho, aunque no de la misma generación— le parece que es prioritario que la LVII Legislatura resuelva los problemas de educación, desarrollo regional y salud, antes de tomar una decisión en torno a las mentiras de Juárez Acevedo.

“Creo que hay temas mucho más prioritarios como educación, salud, trabajo, desarrollo regional y que por supuesto este es un tema secundario, porque la Comisión de Transparencia existe y funciona como tal, y ya quien la dirija o no, no está en cuestión en este momento”.

Como se recordará, el pasado 24 de septiembre Cambio publicó y documentó cómo es que Antonio Juárez Acevedo mintió a los diputados de la LV Legislatura al postularse como candidato a comisionado de Acceso a la Información Pública, puesto que desde 1999 hasta la fecha funge como secretario general de la agrupación política nacional (APN) Plataforma Cuatro, hecho que viola de manera flagrante los artículos 27 y 28 de la Ley de Acceso a la Información, que prohíben a los comisionados tener un cargo como dirigente partidista, así como el 50 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.

Cambio dio cuenta de una copia certificada por el Instituto Federal Electoral (IFE), firmada por el secretario ejecutivo, Manuel López Bernal, que dice: “Según documentación que obra en los archivos de este Instituto, el licenciado Antonio Juárez Acevedo se encuentra registrado como secretario general del Comité Ejecutivo Nacional de la Agrupación Política Nacional denominada ‘Plataforma Cuatro’ (…) a los 28 días del mes de agosto del año 2007”.

—¿Cuándo se resolverá el expediente de Juárez Acevedo? —se le preguntó al presidente de la Gran Comisión.
—Hasta hace cinco minutos soy el presidente de la gran Comisión, tendré que entrar al análisis para resolver conforme a derecho.
—¿Para usted no es prioritario?
—Creo que hay temas mucho más prioritarios como educación, salud, trabajo, desarrollo regional y que por supuesto este es un tema secundario, porque la Comisión de Transparencia existe y funciona como tal, y ya quien la dirija o no, no está en cuestión en este momento.
—¿Por qué dice que no es prioridad para el Congreso?
—No, yo no dije que no fuera prioridad. Me malinterpretaron.
—Sí, señor, lo acaba de decir en este momento.