Cano militariza el C4


Denuncias anónimas al 089 son conocidas al fin por autoridades poblanas


De acuerdo a fuentes consultadas el director del Centro de Comunicación, Control, Comando y Computo se mantiene a las órdenes de su ex jefe, el general Mario Ayón Rodríguez, en vez de rendir cuentas ante María de Lourdes Nares Rodríguez


Edmundo Velázquez

 

Enrique Cano Cardiel, director del Centro de Comunicación, Control, Comando y Cómputo (C4) ha permitido que el Ejercito Mexicano realice monitoreos sobre todas las llamadas de denuncia anónima del número 089 del Consejo Estatal de Seguridad Pública (CESP).


Esto ha provocado que se hayan llevado a cabo una serie de operativos erróneos, debido a que, antes de ser comunicado el Gobierno del estado de Puebla, se da aviso a las fuerzas castrenses.


De acuerdo a fuente al interior del C4, el mismo Cano Cardiel se mantiene a las órdenes de su ex jefe, el general Mario Ayón Rodríguez, secretario de Seguridad Pública y Vialidad Estatal, en vez de rendir cuentas ante María de Lourdes Nares Rodríguez, secretaria técnica del CESP.


Antes de que llegara Cano Cardiel, el C4 se mantenía en poder de la subsecretaría de Seguridad Pública Estatal, coordinado por Armando Toxqui Quintero. En cuando una denuncia anónima llegaba al número 089 se canalizada a la dependencia pública indicada como siempre se trabajó mientras estuvo al frente del CESP, Alejandro Fernández Soto.


A la salida de Fernández de la reorganización del C4, Enrique Cano Cardiel fue nombrado su director a partir de los primeros días del 2009. Cano de inmediato pidió una cuadrilla de la XXV Zona Militar para que monitorearan todas las denuncias.


Por lo que, antes de ser conocidas por el Gobierno del Estado, la Secretaría de Gobernación, la Procuraduría General de Justicia, la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad, las denuncias son comunicadas directamente al Ejército, por lo que se han incrementado los operativos militares en los primeros meses del 2009. Con esto, el nuevo titular del C4 ha roto la cadena de mando y el manejo que se tenía anteriormente con los miembros del CESP.


Fuentes de CAMBIO en el Consejo Estatal informaron que ya ocurrieron varios casos en los que estas falsas llamadas llegan directamente a manos de la milicia y después a las autoridades, provocando mayor pánico entre los ciudadanos.


El primero de ellos fue un operativo ocurrido el día 13 de febrero en La Calera. Ese día en el C4 llegó un reporte de un supuesto secuestro a la línea de denuncia anónima 089. Cano Cardiel de inmediato notificó a militares quienes incluso entraron a la vivienda. Más tarde acudieron la Policía Judicial y la Policía Metropolitana. Ricardo Espinosa, el dueño de la casa cateada, se quejó e inició una queja ante la Comisión de Derechos Humanos contra los miembros de la XXV Zona Militar. Después el propio procurador Archundia confirmó que la llamada había sido una “falsa alarma”.


Otro de los casos conocidos fue la supuesta caída de una aeronave en la zona de Rinconada, junta auxiliar de Chignahuapan. Una llamada a C4 reportó que había mucho humo negro que provenía de un objeto quemándose entre los cerros. La llamada, una vez más, fue atendida de primera instancia por el Ejército y las autoridades estatales fueron hechas a un lado.


Por la noche los elementos de seguridad y el Ejército Mexicano encontraron un montón de llantas quemándose, y confirmaron que no había caído ningún artefacto.

 

Busca desaparecer servicios de emergencias


Además de las pasadas inconformidades que se habían dado a conocer entre paramédicos del Sistema de Emergencias 066 y la falta de pago que ocurrió recién llegada la secretaria técnica, María de Lourdes Nares Rodríguez, existen ya quejas entre los paramédicos.


Entre los encargados del sistema de ambulancias y rescate circula ya la versión de que Enrique Cano Cardiel ha amenazado con eliminar esas plazas del Consejo Estatal de Seguridad e incluso desaparecer los servicios de emergencias.

 

 

 

 

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