La disidencia magisterial en Puebla se sigue fortaleciendo ante el rechazo de la base docente del SNTE hacia la reforma educativa. Ayer, un paro activo o “huelga de brazos caídos” dejó sin clases a casi 30 mil alumnos en todo el estado, pues lo docentes se presentaron en las escuelas pero no trabajaron, con el objetivo de evitar sanciones. En los centros escolares de la capital, el Benemérito Instituto Normal del Estado (BINE) y varias escuelas al interior del estado se sumaron al paro cívico nacional convocado por la CNTE.

Además, por la tarde se llevó a cabo la tercera movilización de docentes poblanos. A diferencia de la escueta asistencia en las dos primeras, ahora sí lograron convocar por lo  menos a 6 mil maestros que marcharon con mantas y consignas del reloj del gallito a Casa Aguayo, sin que se presentaran conatos de violencia, mostrando una capacidad de convocatoria inédita.

El gobierno estatal buscó aminorar el impacto del paro activo a través de un boletín en el que culpó a la difusión de información “panfletaria” el hecho de que los padres de familia no llevaran a sus hijos a la escuela, aunque los profesores estuvieron ahí para prestar el servicio educativo.

En medio del creciente descontento, el gobierno estatal difundió otro boletín para celebrar el acuerdo salarial con las secciones 23 y 51, la última doble negociación salarial. Sin difundir los montos, la información se acompañó una fotografía de la reunión de trabajo presidida por el gobernador Moreno Valle, los dirigentes Emilio Salgado Néstor y Jorge Luis Barrera de la Rosa, así como deAlfonso Cepeda Salas, representante del Comité Nacional del SNTE.

Por último, docentes de la sección 51 tomaron la autopista de Esperanza, en la autopista a Veracruz, dejando el libre paso a los automovilistas, replicando así el modelo de protesta que la CNTE realizó en días pasados en la caseta de Chalco.

Disidentes poblanos suspenden clases

El magisterio disidente de la sección 51 en Puebla estuvo de “brazos caídos” durante la jornada escolar del día de ayer, concretamente en los centros escolares de la capital, pues aunque las autoridades se negaron a brindar información la suspensión de clases fue confirmada en un recorrido realizado por CAMBIO en dichas instituciones.

Fueron los propios alumnos de los centros escolares Niños Héroes de Chapultepec, Gustavo Díaz Ordaz, Morelos y Miguel Alemán quienes confirmaron la suspensión de clases en los niveles de preescolar y primaria.

Las autoridades de dichas instituciones impidieron el acceso a los medios de comunicación y delegaron a la SEP la explicación correspondiente.

Muchos de los alumnos llegaron a sus aulas al igual que los maestros de la sección 51 que se unieron al paro nacional promovido por la CNTE, sin embargo no impartieron clases, por lo que estudiantes, principalmente de primaria y preescolar, perdieron el tiempo en su escuela.

El personal encargado de la seguridad en los puntos de acceso a las escuelas reconoció abiertamente que la instrucción fue prohibir la entrada de los medios de comunicación, y que para cualquier información la encargada era la SEP.

Minimiza SNTE marcha magisterial

El líder de la sección 51 del SNTE, Jorge Luis Barrera de la Rosa minimizó la situación, pues dijo que sólo fueron 200 docentes de los centros escolares no dieron clases en las aulas pese a asistir a sus escuelas, lo cual afectó a 5 mil alumnos.

“A través de un evento de ‘brazos caídos’ los maestros se presentaron en sus escuelas pero no dieron el servicio educativo”, dijo.

Señaló que la sección que representa cuenta con 30 mil personas afiliadas entre personal docente y de apoyo, por lo que hasta el momento se desconoce el número exacto de quienes simpatizan con el movimiento.

Asimismo, en el BINE dijo que las clases sólo fueron suspendidas para los alumnos de preescolar a bachillerato, pues el nivel de licenciatura trabajó con normalidad.

SEP culpa a alumnos y medios de la suspensión de clases

Por medio de un comunicado de prensa, la Secretaría de Educación Pública prefirió ocultar los brotes de inconformidad en el magisterio disidente y argumentó que por “información inexacta y panfletaria” los alumnos no asistieron a clases.

Según el comunicado de la SEP, la información que propagó la disidencia magisterial provocó desorientación en algunos padres de familia “que este miércoles no llevaron a sus hijos a la escuela, no obstante que todos los planteles permanecieron abiertos con los maestros en las instituciones”.

Además, afirmó que las “fuerzas políticas organizadas del país” están analizando los beneficios de la reforma educativa en buenos términos, sin embargo sólo hizo referencia a las Cámaras de Diputados y Senadores, sin mencionar en ningún momento a la CNTE.