El testimonio, recogido por Daily Mail, cuenta la historia de Claire y Pauline, dos nombres que no corresponden con la verdadera identidad de las mujeres, que fueron vendidas en múltiples ocasiones por su madre y a cambio de algunas copas de alcohol o cantidades que no superaban las 5 libras.
Por ello, Claire tuvo que mantener relaciones sexuales con pedófilos cuando no superaba los diez años. La situación perduró hasta que la británica quedó embarazada a los 15 años de edad. Su madre quiso obligarla a dar el niño en adopción, algo a lo que se negó Claire. El embarazo le dio fuerza para escapar.
Su madre, ya fallecida, nunca pagará por lo que le hizo, pero Claire asegura que cuenta su historia para que otras niñas o mujeres no toleren nunca este tipo de vejaciones.
