Si alguien quiere conocer las propiedades, casas, vehículos, cuentas bancarias, joyas o inversiones con las que entra y sale un Mandatario de su Administración no encontrará nada publicado en los portales de transparencia locales, ya que la mayoría no sube ni un solo dato de su patrimonio.

La transparencia de esta información es valiosa especialmente en época de elecciones y cuando en las últimas semanas se ha cuestionado un posible conflicto de interés tras destaparse la “Casa Blanca”, de la Primera Dama, y una del Presidente, compradas a contratistas del Gobierno: Higa y la familia San Román.

Una revisión de REFORMA a los portales de Gobierno y leyes de transparencia de las 32 entidades encontró que ningún Mandatario presenta información patrimonial en los portales de transparencia oficiales.

Tres Gobernadores dan a conocer algo de su información: dos en el sitio de la Contraloría y uno en su página personal.

Graco Ramírez, de Morelos, es el único que presenta sus declaraciones patrimoniales correspondientes al 2012, 2013 y 2014, aunque con los datos más básicos, como ingreso acumulado.

Arturo Núñez, de Tabasco, revela sus declaraciones patrimoniales en el portal de la Contraloría local hasta el 2013. El oaxaqueño Gabino Cué tiene declaraciones con detalle de propiedades, vehículos, cuentas y hasta declaración de impuestos, pero la última es del 2009, previo a asumir su mandato, y no está en el portal de transparencia local, sino en su página personal.

La opacidad que predomina entre los Gobernadores se origina en las leyes locales, que no los obliga a exhibir públicamente su declaración.

La mayoría sólo cumple con entregarla a la Contraloría o al órgano fiscalizador del Estado.

Una excepción positiva en el País podría ser Coahuila, cuya ley señala que se tienen que dar a conocer las declaraciones patrimoniales de los funcionarios, incluido el Gobernador, pero tal disposición aún no entra en vigor.

Otra muestra de opacidad es Chihuahua, donde la ley mandata publicar las declaraciones patrimoniales y, aunque existe el apartado específico en el portal de transparencia, el sitio señala que no hay registros.

También está el Estado de México, donde la ley de transparencia ni siquiera menciona las declaraciones patrimoniales.

Lidera en salario Moreno Valle

Aunque la mayoría oculta los bienes y cuentas bancarias que tienen, todos los gobernadores del País exhiben en sus sitios de transparencia el sueldo mensual neto que ganan.

Si bien el ingreso oficial de los mandatarios no es lo más alto de la Administración Pública del País, existe una gran disparidad entre los salarios que reportan de un estado a otro.

Pese que realizan labores similares y tienen un responsabilidad legal del mismo tipo, entre el sueldo neto más alto y más bajo de gobernador existe una diferencia de 177 por ciento.

Está el caso de Mariano González, de Tlaxcala, quien dice ganar 49 mil 542 pesos netos.

El nivel de ingresos del Mandatario tlaxcalteca es el que tiene un director de área de una secretaría de Gobierno federal.

En el otro extremo aparece Rafael Moreno Valle, Gobernador de Puebla que gana 137 mil 541 pesos mensuales netos.

Le siguen Miguel Márquez, de Guanajuato, y Eruviel Ávila, titular del Estado de México, quienes perciben más de 130 mil pesos al mes.

Un poco más abajo de ellos, con sueldos ligeramente por encima de los 120 mil pesos, se encuentran Carlos Lozano, de Aguascalientes, y César Duarte, de Chihuahua.

Los gobernadores de Nuevo León, Rodrigo Medina y de Jalisco, Aristóteles Sandoval, se ubican a la mitad de la tabla de sueldos, con más de 88 mil pesos mensuales netos.

El Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, recibe un sueldo mensual neto 73 mil 692 pesos. Los sitios de transparencia de los Gobernadores de Guerrero, Tamaulipas y Yucatán solo exhiben sus ingresos brutos.

En el caso del interino guerrerense Rogelio Ortega, declara que percibe 163 mil 240 pesos. Mientras el tamaulipeco Egidio Torre reporta un salario de 146 mil 996, el yucateco Rolando Zapata aparece con 142 mil pesos mensuales.

Fuente: Reforma