La Procuraduría General de la República (PGR) a través de la Subprocuraduría de Control Regional, en su delegación en Chiapas, incineró más de media tonelada de narcóticos, los cuales estaban relacionados con 16 averiguaciones previas.
Lo anterior ocurrió en el marco del programa de Destrucción de Narcóticos, el cual prevé la incineración de drogas aseguradas además de los objetos que son instrumentos del delito.
La medida se efectuó en coordinación con la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR) y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), en las inatalaciones de la 14 a Zona Naval, en la cudad de Tapachula, Chiapas.
Ello se realizó en presencia de las autoridades y de personal del Órgano Interno de Control de la PGR. Éste último, verificó que el procedimiento se llevara a cabo en los términos de la normatividad en la materia aplicables.
Lo incinerado incluyó: 633 kilos 890 miligramos de cocaína, 8 kilos 387 gramos 910 miligramos de mariguana, así como dos objetos del delito.
El narcótico asegurado es resultado del trabajo coordinado entre los tres niveles de gobierno, como parte frontal de la lucha contra el narcotráfico y otras conductas ilícitas en el estado.