Tuesday, 16 de April de 2024

Viernes, 27 Marzo 2015 20:12

Olvida el dólar, checa las opciones para vacacionar en pesos #SemanaSanta

Con el dólar en las nubes, hay ciudades clásicas (pero renovadas y seguras) para vacacionar en Semana Santa sin salir de México


¿Pospusiste tu viaje por crucero en el Caribe o a Disney World por el alto precio del dólar? Este año la revista Chilango te propone algunas opciones para disfurtar tus vacaciones de Semana Santa (y los puentes que vienen en el año) sin salir de México... y en pesos para no vaciar tu cartera.

Puerto Vallarta 

Por qué ir: Puerto Vallarta tiene un clima tropical la mayor parte del año, así que hasta ahora no tendrás lluvias. Y además del sol, todavía puedes ver ballenas jorobadas (la temporada termina este mes).

Qué ver y hacer: Si quieres estar cerca de estos impresionantes mamíferos, puedes hacerlo en alguno de los tours que te llevan en un pequeño bote que navega durante tres horas.

Aunque ésta es una de las playas más turísticas del país, aún mantiene las calles empedradas y un animado malecón lleno de bares y restaurantes; una experiencia obligatoria cuando cae el sol.

La playa de los Muertos y la de Olas Altas son las más concurridas de la zona, sobre todo durante los fines de semana. Así que puedes recorrer la costa hacia el sur, a menos de 20 minutos en coche o un poco más en camión, para disfrutar la playa de Mismaloya, donde se grabó La noche de la iguana, la mítica película de John Huston.

No te lo pierdas: Aunque las islas Marietas ya empiezan a ser conocidas, todavía es un destino que no aparece en todas las guías, por lo que tal vez ahora sea el momento perfecto para visitarlas.

Uno de los tours que recomendamos sale desde Puerto Vallarta o de otros puntos convenientes. Un bote te llevará hasta las islas; deberás esperar a que baje la marea para entonces nadar hasta el interior de la misma, pues el efecto del agua ha formado una cueva por la que entras hasta llegar a la playa Escondida. Antes de meterte en las islas, podrás hacer esnórquel para observar la abundante fauna marina; durante el recorrido verás muchos pájaros migratorios que anidan en las Marietas.

Hacia el norte, pasando Punta Mita, está Sayulita, con una espectacular playa con palmeras, chiringuitos y ambiente surfero y bohemio.

Dónde dormir: Marina Vallarta y Nuevo Vallarta son las zonas hoteleras por excelencia. Pero en el centro de la ciudad existen hoteles con mucho encanto.

Dónde comer: Vale la pena ir a Sayulita. Entrando por la carretera de Puerto Vallarta, en una cuchilla camino a la playa está El Rinconcito, puesto callejero donde  hay unas empanadas de marlín, aguachiles y tacos de camarón de fábula. Por la noche, en el Café des Artistes, en el centro de Vallarta, prueba la crema de langostinos y calabaza. Para pescado fresco, Mariscos Tino’s.

Monterrey

Por qué ir ahora: La segunda ciudad más grande de México es un buen lugar donde vacacionar, rodeada por montañas y cercana a los impresionantes paisajes de La Huasteca.

Qué ver y hacer: Un atardecer en el Cañón de la Huasteca, comiendo cabrito al más puro estilo regio, bastará para que te olvides de todo. Está a 20 minutos del centro de Monterrey, en Santa Catarina. Es el parque adonde van los regiomontanos a pasear en bici, hacer picnic familiar, practicar rapel o seguir alguna de las 180 rutas para escalar. La zona está patrullada todo el tiempo.

Si quieres fotografías panorámicas impresionantes de Monterrey, sobrevuélala en helicóptero; verás las majestuosas montañas de la Sierra Madre y el Cerro de la Silla, los íconos de la ciudad –el Horno 3, Paseo Santa Lucía, Río Santa Catarina, Obispado–. Siéntate del lado contrario del piloto para tomar excelentes fotos. Pararán tres horas para que camines por senderos de la montaña y te consentirán con una deliciosa comida.

Por la tarde quédate en la ciudad y supervisa por ti mismo los peligros a los que se exponían los trabajadores de la Fundidora de Nuevo León. Conoce la zona a través de una tirolesa, haciendo rapel y caminando sobre un puente colgante. Este tour, Canopy h3, se hace en las instalaciones del Museo del Acero, horno3, dentro del Parque Fundidora, ahí donde está el foro que alberga varios de los conciertos más importantes que se presentan en la ciudad. No dejes de ir al Museo de Arte Contemporáneo.

No te lo pierdas: Puedes ir a hacer senderismo –por la mañana– en el cañón Matacanes, ruta turística que inicia observando los cañones de la Sierra Madre y que no es apta para cardiacos. Si te internas en el bosque, deberás arrojarte al agua hasta de 12 metros de altura, nadar, descender a rapel por las cascadas e internarte en la oscuridad total de un río subtérraneo. Esto está a 30 minutos de la ciudad.

Dónde dormir: Para consentirte, opta por el Gran Hotel Ancira, con más de 100 años de historia. Está en el centro, cerca de todo para divertirte –visita su Bar 1900, entre los mejores del estado–. La Casa del Barrio ofrece el servicio de Bed and Breakfast; está a dos cuadras del Marco y la Macroplaza.

Dónde comer: Uno de los restaurantes de alta cocina es La Embajada, en Plaza San Agustín: cocina mexicana que va de “pizza” (una tlayuda) al típico cabrito; de postre pide helado de palomitas. El Gran Pastor es austero pero destaca por su cabrito y sus frijoles con veneno. ¿Un clásico? El Rey del Cabrito.

Mérida

Por qué ir ahora: La capital yucateca vive un renacimiento en el que se encuentran historia y vanguardia. Y no se diga de sus chefs, quienes han encontrado referencias para nuevos platillos en los sabores tradicionales: como ejemplo basta visitar las mesas de K’U’UK y Néctar, cuyos chefs han reinterpretado algunos platillos de la región.

Qué ver y hacer: Toma el tour que te lleva por el Paseo Montejo a admirar la arquitectura colonial de la ciudad o lánzate a Chichén Itzá en un recorrido de nueve horas.

Aventurarse en las cantinas del centro –La Negrita, La Mala Santa y La Mala Vida son nuestras favoritas– es la mejor forma de terminar el día, rodeado de comida y cervezas, antes de arrancar una noche larga. La mezcalería Fundación y el antro Casa Pompidou, son paradas obligadas.

No te lo pierdas: El día perfecto en Mérida comienza con una visita mañanera a Coqui Coqui, el más joven en la cadena de hoteles boutique y perfumerías inspirados en los elementos naturales de la península yucateca –se han establecido también en Cobá, Tulum y Valladolid.

Dónde dormir: Opta por alguna de las siete habitaciones de Casa Lecanda, a unos metros del Paseo Montejo o el Wyndham Mérida: dos de los edificios históricos convertidos en hoteles que salpican el centro histórico.

Dónde comer: Empieza con las sopas, tacos y tortas en el mercado de Santa Ana o en el de Santiago, para terminar con los antojitos de huevo con chaya, lomitos de Valladolid y castacán (como le dicen al gordito del chicharrón) de Wayané o en unos tostones con dzic de venado (una especie de salpicón) en Almíbar.

Guanajuato

Por qué ir ahora: Elegida Capital Iberoamericana de la Cultura Gastronómica de 2015, Guanajuato es el primer destino mexicano en ostentar esta distinción internacional, así que sugerimos una ruta por su diversidad culinaria.

Qué ver y hacer: Para conocer esta ciudad hay que explorarla a pie, y así disfrutar sus numerosas plazas y cafés en un impresionante laberinto de túneles y callejones. Obligadísimas las visitas al Teatro Juárez, de los de mayor tradición en México, y la Alhóndiga de Granaditas, edificio emblemático de nuestra historia, así como sus famosas momias.

No te lo pierdas: Para disfrutar de un buen día de compras es mejor ir a León, centro del shopping del estado y no sólo por sus zapatos, por los que esta ciudad es mundialmente famosa. Ve muy temprano al Parque Metropolitano y pasea en globo aerostático.

Tendrás una vista panorámica del centro de León, incluso, podrás celebrar tu cumpleaños o una fecha especial en él (también puedes volar en globo por Guanajuato). Antes de regresar ve al barrio de San Juan de Dios y busca una “guacamaya”, una picosita torta de chicharrón.

Haz el Circuito del Tequila, que recorre el suroeste del estado (en agencias como Xanharati). Incluye la visita y cata en las tequileras con denominación de origen, como Hacienda Corralejo.

Dónde dormir: El Catrín es un hostal con decoración sencilla y tradicional cuyo punto fuerte está en su localización: el centro de la ciudad. O puedes optar por el Hotel Boutique 1850, moderno y lujoso, en pleno centro histórico, en un increíble edificio neoclásico del año 1850.

Dónde comer: Prueba la cocina de autor de El Jardín de los Milagros, los platillos prehispánicos de La Virgen de la Cueva, los bocados típicos en el mercado Hidalgo, como las enchiladas mineras, o el menú tradicional de Las Mercedes.

Fuente: CNN

Last modified on Viernes, 27 Marzo 2015 20:36