La falta de seguridad, obra pública, actos de corrupción y nepotismo ha derivado en hechos violentos en una docena de municipios en el último año, en donde los habitantes han hecho justicia por propia mano, quemando unidades oficiales o particulares, además de llegar a las agresiones físicas contra los presidentes municipales.

Entre los últimos casos destaca Altepexi, en donde en la madrugada del martes 6 de octubre, un grupo enardecido  de habitantes incendiaron un auto y la casa del presidente, Lorenzo Reyes Mariano, del partido Movimiento Ciudadano, además que saquearon su mueblería y lo obligaron abandonar la demarcación.

Un hecho similar se registró el pasado 20 de septiembre n cuando un grupo integrado por aproximadamente 200 pobladores de Chietlaquemó cuatro unidades frente la Presidencia Municipal, además de dejar destrozos en el inmueble, exigiendo justicia tras el asesinato de una octogenaria, ultimada en su domicilio en la noche del sábado, tras haber sido asaltada.

En tanto, el 14 de septiembre, habitantes del municipio de General Felipe Ángeles tomaron el Palacio municipal y golpearon al alcalde verdeecologista, Leonardo Gómez Octavianoy a dos de sus policías. Además, dañaron vehículos oficiales y robaron armas.

En estos últimos tres casos, los comuneros buscaban linchar a presuntos responsables de hechos violentos como asaltos a mano armada y asesinatos, pero los policías lo impidieron.

Pese estos hechos, la Secretaría General de Gobierno (SGG) ha negado que exista ingobernabilidad.

El pasado 27 de septiembre, un grupo de lugareños de Cohuecán también buscaron hacer justicia propia, linchando a dos de tres presuntos secuestradores que minutos antes habían intentado plagiar a una quinceañera.

Hechos similares se han registrado en Tlacotepec de Benito Juárez, Venustiano Carranza, entre otros.