Friday, 29 de March de 2024

Viernes, 22 Abril 2016 02:50

Estamos a tiempo de tomar medidas




Written by  Gabriel Sánchez Andraca

Si tomamos en cuenta lo que ha estado pasando en Chihuahua, Tamaulipas, Sinaloa, Michoacán, Veracruz y ahora en Guerrero, donde la delincuencia se ha desatado y sólo ha podido frenarse cuando la sociedad civil se decide a participar, es momento para que en Puebla la sociedad se organice.


El reporte del Registro Nacional de Personas Extraviadas o Desaparecidas es alarmante, en lo que a Puebla se refiere.

 

En el 2005, según se informó ayer en este diario, hubo un total de 3 desaparecidos, igual cantidad que en el 2007.

 

Para el 2008, la cantidad se elevó a 30; en el 2010 a 37 casos y de ahí ha estado aumentando hasta llegar al 2014, año en el que las desapariciones fueron 236 y en el 2015 hubo un incremento del 42 por ciento llegando a 334. En lo que va de este año, ya van 24 casos de desaparición forzada.

 

En ninguno de los estados antes mencionados, donde la delincuencia organizada o desorganizada ha sentado sus reales, la acción de las autoridades ha podido frenar este tipo de delitos. En Michoacán, la sociedad civil creó las llamadas autodefensas que intentaron sustituir a la autoridad, logrando una mayor atención del gobierno federal que ha atenuado la comisión de delitos.

 

En Guerrero, desde hace años, muchos pueblos crearon sus policías comunitarias, que también han sido rebasadas en parte por los delincuentes, pero ahora, al margen de las autoridades federales, estatales y municipales, organismos del sector privado, académicos de diversas instituciones de educación media y superior, profesionistas principalmente médicos y enfermeros, los más acosados últimamente y autoridades eclesiásticas, han tomado la decisión de intervenir directamente para reducir los niveles de gobernabilidad, traducidos en violencia que se viven en Guerrero, principalmente en Acapulco, Chilpancingo y otras ciudades y regiones de aquél estado.

 

En conferencia de prensa realizada en el zócalo de Chilpancingo, los involucrados en este proyecto por voz del empresario Francisco Osorio, informaron que en primer lugar decidieron tener una organización independiente, que pueda elaborar una agenda al gobierno con un proyecto ciudadano.

 

Incluye ese proyecto la creación de una Contraloría Social, calificándola como un tema difícil, porque cuando hay corrupción se da por las dos partes: hay amiguismo, influyentismo, que perjudica a todos y citó como ejemplo lo que ocurre en el transporte.

 

El proyecto “Levantemos Chilpancingo” pretende superar los bajos niveles de gobernabilidad, reconstruir la capital del estado con acciones que fortalezcan el estado de derecho, la seguridad, el control de la corrupción; eficiencia y eficacia del gobierno y el combate a la pobreza.

 

Eso mismo se haría en Acapulco y en todos los municipios guerrerenses para superar la actual situación, ya que hay lugares de ese estado, que prácticamente son gobernadas por los grupos criminales, dijeron.

 

Cuando los casos de personas desaparecidas se elevan de 3 anuales en 2005 y 2007 a 334, en el 2015 y los cuerpos de seguridad de los tres niveles de gobierno no resuelven gran cosa, es urgente que la ciudadanía se organice para colaborar activamente y evitar que el mal se extienda y llegue a controlar las regiones más vulnerables de la entidad, como son las ciudades y pueblos de las fronteras con Veracruz, Morelos, Tlaxcala, Guerrero, Oaxaca, Hidalgo y Estado de México.

 

Las autoridades solas, no podrán hacer gran cosa. Hay que tener en cuenta que las policías municipales de México, están consideradas entre las más ineficientes y corruptas del mundo. Es necesaria la colaboración ciudadana independiente para obtener resultados realmente positivos.

 

Las campañas políticas para la gubernatura del estado, están en todo su apogeo. Están por terminar su tercera semana y ha quedado claro, que la elección se decidirá entre los candidatos del PRI y del PAN.

 

Blanca Alcalá, del PRI y pequeños aliados que lo acompañan y Antonio Gali, del PAN y también con pequeños aliados que conforman su alianza, son quienes están disputándose el puesto de gobernador para los 20 meses siguientes al término del actual gobierno.

 

Blanca estuvo en Ajalpan, considerado el municipio más importante de la región conocida como la “sierra negra”, donde ofreció poner atención para resolver los problemas de esa empobrecida región, que prácticamente, dijo, ha sido olvidada por las autoridades estatales.

 

Afirmó, que ella no gastará el dinero del presupuesto para construir un gran museo en la ciudad de Puebla, sino para apoyar el desarrollo de las regiones más pobres de la entidad, donde las personas carecen de oportunidades para salir de la difícil situación que enfrentan. Impulsar el campo, las artesanías, la educación, la salud y la vivienda digna, serán sus prioridades.

 

Antonio Gali, el candidato del PAN, ofreció en Cholula, donde tuvo una reunión con mujeres, darles mayores oportunidades de progreso para que vivan con dignidad y en condiciones de igualdad.

 

Un día antes, Gali Fayad había estado en Libres, donde ofreció que todos los hospitales y centros de salud dependientes del Estado, tendrán médicos y enfermeras o enfermeros responsables y en cantidad suficiente para atender las necesidades de la gente.

 

Habrá instalaciones adecuadas y medicamentos suficientes para todos.

 

Así respondió a las quejas que vecinos de la región le plantearon por la ineficiencia en la atención que brindan los hospitales y centros de salud de esa zona.

 

Abraham Quiroz, de Morena y Roxana Luna, del PRD, también siguen su lucha por obtener el voto popular. Ellos saben perfectamente que sus posibilidades de triunfar, son prácticamente inexistentes, pero pueden lograr aumentar la militancia de sus respectivos partidos, crear estructura y la organización que necesitan para crecer y constituirse como fuerzas políticas fuertes y respetadas en un futuro próximo.

 

Doña Ana Teresa Aranda, ya recibió la parte de las participaciones que le faltaban del IEE y el dinero de que dispondrá para su campaña, por esa vía, se elevó de 200 mil a poco más de 300 mil pesos. Parece que en el Instituto Estatal Electoral hay alguien con inteligencia, que evitó otro escándalo, al anular la decisión de dicho organismo, de entregarle solo parte del dinero que le correspondía, por haber “llegado tarde a la campaña”, como si eso hubiera sido culpa suya.

 

 

Rate this item
(0 votes)
comments powered by Disqus