Thursday, 18 de April de 2024

Miércoles, 08 Junio 2016 03:13

Lo que faltaba: guerra interna en el PRI




Written by  Gabriel Sánchez Andraca

En vez de analizar y discutir cuáles fueron las causas de la debacle priista en Puebla, los militantes del Partido Revolucionario Institucional están entrando en una guerra interna, que los podría llevar a una debacle tal, que difícilmente los haría recuperar el poder a corto o mediano plazo.


Deben darse cuenta de su realidad. Los priistas de ahora ya no son como los de antes. Todos los militantes de todos los partidos políticos de México, salvo raras excepciones, han pasado al pragmatismo rampante, al pragmatismo salvaje, es decir, su partido les vale, lo que quieren es acceder al poder, bien a través de un puesto de elección popular o de un puesto administrativo que les dé cierto poder y dinero. Lo demás, es lo de menos.

 

Los priistas son los más pragmáticos de todos y una prueba de ello, es que están bien colocados en todos los partidos políticos de izquierda y de derecha.

 

Ya le habíamos dicho, que de los siete estados del país, ganados por candidatos del PAN y sus aliados, entre ellos el PRD en algunos casos, cinco son ex priistas y sólo dos tienen militancia panista.

 

El candidato triunfador en Chihuahua es panista de toda su vida, es aguerrido al grado de que la dirigencia del blanquiazul fue la que con mayor fuerza se opuso a que obtuviera la candidatura, pero se impuso su aguerrido carácter y ahora es triunfador.

 

Ese tipo de panistas están en extinción. Acaba de morir el señor Luis H. Álvarez, que también era panista de la vieja guardia, no “padre fundador” ni hijo de alguno de los santones de la vieja guardia, ya extintos casi todos, pero educado políticamente por ellos, como el también chihuahuense Javier Corral que ganó la elección de su estado contra la oposición de la dirigencia de su partido.

 

Dijimos en este espacio que la lucha por la minigubernatura de Puebla, se daría entre el PRI y el PRIAN, porque fueron priistas los operadores de los dos candidatos más fuertes.

 

El PRI ha sido en México, la mejor escuela de política en el país.

 

Los fundadores del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Manuel Camacho Solís, fueron gente formada políticamente en el PRI; el ex candidato presidencial, fundador de Morena, Andrés Manuel López Obrador, también fue priista y dirigente estatal del PRI en Tabasco; el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, también salió de las filas priistas, como muchos que operan actualmente en el PAN y ocupan puestos dentro de la actual administración.

 

En cuanto a los senadores de oposición poblanos, Manuel Bartlett Díaz, (PT) Miguel Barbosa Huerta (PRD) y Javier Lozano Alarcón (PAN), fueron priistas.

 

Varios diputados locales que están en la oposición, fueron priistas y muchos de los operadores del PAN también.

 

El pragmatismo es la nueva doctrina política que prevalece en el país. Se acabaron el liberalismo priista, el conservadurismo panista y el izquierdismo perredista.

 

Los priistas que han sido los que mejor han aprovechado esa corriente de moda en la política mexicana, pues se pasan de un partido a otro con la mayor comodidad, ya deberían ubicarse como fuerza política, en la realidad y actuar en consecuencia.

 

Siguen formando parte del partido mejor estructurado y mejor organizado y del que están saliendo los principales líderes de otras fuerzas políticas. Entonces para qué carambas se van a estar peleando internamente, ¿para convertirse en un PRD, sin capacidad para unificarse. Siempre confrontado entre sí, sin militancia, sin estructura, sin organización y aliado en muchas partes, del que debería ser su peor adversario ideológico?

 

El PAN ya no es adversario del priismo. Ambos partidos son neoliberales que algunos califican como de centro-derecha.

 

Aunque el PAN sigue atacando a los priistas señalándolos como corruptos, la realidad es que los panistas en el poder han sido más obvios en ese aspecto, que los priistas que saben guardar mejor las formas.

 

Cuando su dirigente nacional Ricardo Anaya, dice que “han iniciado su regreso al poder”, basta con recordar a los gobiernos de Vicente Fox y de Felipe Calderón, para correr en busca de protección. ¿Con quién cree que se inició la guerra sucia que ha degradado a la política mexicana? Sí, fue con Fox. ¿Con quién cree que se inició la guerra de la delincuencia organizada y del narcotráfico que dejó, en el gobierno que él presidió, más de cien mil muertos y treinta mil desaparecidos? Sí, en el gobierno de Felipe Calderón.

 

La debacle del país principió con el neoliberalismo económico impuesto por Carlos Salinas de Gortari y su grupo de tecnócratas. De eso no cabe la menor duda.

 

El PAN arribó al poder de la república, porque los priistas, cosa rara en ellos, empezaron a rebelarse contra la tecnocracia de su propio partido que encabezaba Salinas. Para evitar que los priistas cambiaran el rumbo neoliberal que habían impuesto, se cedió el poder al PAN. Ernesto Zedillo, entonces presidente de la república, dio a conocer el triunfo de Fox, antes de que terminara el conteo de los votos en las casillas, como ahora la dirigencia nacional del PRI, dijo con demasiada anticipación, que el único estado donde la votación no les era favorable, era Puebla.

 

Por eso muchos priistas dicen que el triunfo del PAN estaba negociado. Ayer explicamos los graves errores que se cometieron en el PRI y los aciertos que tuvo el PAN.

 

La guerra sucia hizo que la concurrencia a las urnas fuera de menos del 50 por ciento, pues la gente está cansada de los pleitos entre los políticos que lo único que logran es desprestigiar a los partidos y a los políticos y decepcionar a la ciudadanía toda.

 

Es necesario que reine la cordura en las filas de los partidos especialmente en el PRI, que sigue siendo, pese a todo, el partido mejor organizado de México. La unidad y el sentido común, deben anteponerse a los rencores que existen entre los grupos priistas.

 

Ayer hubo diversos actos para celebrar el día de la Libertad de Expresión: dos de ellos, uno organizado por Federico Chilián Orduña y otro por Onesimo Gutiérrez Mendoza, en el jardín de la Libertad de Expresión, esquina de la 11 norte-sur y Reforma.

 

El gobernador del Estado, Rafael Moreno Valle, ofreció una comida en el museo del Barroco, en la zona Angelópolis a directores, propietarios, reporteros y fotógrafos de los medios de comunicación de Puebla en la que hablaron el presidente nacional de la Cámara de la Radio y Televisión y el propio gobernante, quien dijo que era la última vez, durante su gobierno, que tendría una reunión de este tipo con los comunicadores, pues su periodo terminaría el 31 de enero del año próximo.

 

Hizo un balance de su actuación como gobernador y se congratuló de que la ciudadanía poblana haya votado en las urnas el pasado domingo, por la continuación de ese proyecto.

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