El gobernador Rafael Moreno Valle visitó la región el domingo y a su regreso a la capital organizó, junto con los funcionarios de varias de las dependencias estatales el auxilio que se está prestando ya a los damnificados.

 

Se han habilitado escuelas y otros edificios públicos como albergues, a donde han sido trasladadas más de 2 mil personas que perdieron sus humildes viviendas y sus pertenencias.

 

Ya empezó la distribución de alimentos, ropa y medicamentos a quienes lo necesitan.

 

Las brigadas de auxilio se han trasladado a la zona afectada para auxiliar a la población a enfrentar esta tragedia.

 

En Chicahuaxtla, una comunidad perteneciente a Tlaola, murió casi toda una familia al desplomarse el techo de la casa del abuelo, a donde habían ido a refugiarse. Se habla que murieron ahí siete niños.

 

Muchos pequeños pueblos fueron casi destruidos en su totalidad por las intensas lluvias y por las corrientes que se formaron. Hubo avalanchas de lodo al derrumbarse varios cerros.

 

Las autoridades federales, estatales y de los municipios afectados están trabajando coordinadamente para auxiliar a los damnificados. Se están enviando alimentos, medicinas y ropa, así como apoyo médico.

 

En todo el estado de Puebla se están recabando, entre la población civil, alimentos y ropa para las personas que sufrieron la total pérdida de sus pertenencias.

 

Hace aproximadamente diez años, la Sierra Norte del Estado sufrió una tragedia similar.

 

No ha dejado de llover y ya se espera otra tormenta tropical proveniente del Pacífico, aunque los últimos reportes indican que se está disolviendo ya.

 

La secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Rosario Robles, estuvo en la zona afectada el lunes y dijo que se brindará el apoyo necesario a las familias afectadas, en coordinación con las autoridades estatales y municipales. El mismo domingo en la tarde, el gobernador Moreno Valle, anunció que la Secretaría de Gobernación a cargo de Miguel Ángel Osorio Chong, había declarado a la región afectada por la tormenta tropical en el estado de Puebla, zona de desastre, lo que implica que el gobierno federal apoyará con todo a esa región de la entidad.

 

Los priistas ya están poniéndose las pilas y han empezado a trabajar para llevar a varios de sus mejores hombres a las candidaturas para las presidencias municipales que se decidirán en las elecciones del 2018.

 

Aparentemente, nos dice Miguel Ángel Quechol, abogado y estudiante de maestría en la UNAM, que aspira a regir los destinos del municipio de San Andrés Cholula, falta mucho tiempo, pero como están las cosas, debemos empezar a trabajar desde ahora, si queremos competir de veras con nuestros adversarios.

 

El municipio que el abogado Miguel Ángel quiere gobernar, porque en él nació y en él ha formado una familia, tiene 20 años gobernado por el Partido Acción Nacional.

 

Los panistas, nos dicen personas que lo acompañan, no han hecho un buen papel como gobernantes y creemos que ya es tiempo de reemplazarlos con buenas propuestas, buenos proyectos que permitan colocar a San Andrés Cholula, en el lugar que le corresponde.

 

Ese municipio comprende gran parte de Angelópolis, la zona más moderna de la ciudad, donde están las grandes tiendas, empresas de venta de automóviles, conjuntos habitacionales modernos, las modernas instalaciones del Tribunal Superior de Justicia y muchas cosas más.

 

Como municipio, San Andrés Cholula, tiene más de 150 mil habitantes e ingresos que lo colocan en el octavo lugar entre los 217 municipios de la entidad.

 

Sin embargo, pese a su explosivo crecimiento y a su fuerte economía, el progreso no se ve, excepción claro, de la zona de Angelópolis, parte de la cual, es de ese municipio.

 

Por eso los priistas se han unido para conformar un frente fuerte, capaz de ganar en las próximas elecciones.

 

La labor de los priistas ya empieza a notarse y creen que contarán, mejor dicho, lo aseguran, con el apoyo de los habitantes, cansados ya de ineficiencias, pero sobre todo atropellos, de las autoridades surgidas de Acción Nacional, desde hace poco más de 20 años.

 

Nos informan, por otra parte, que priistas de todo el estado se están unificando, aunque todavía no hay un trabajo en ese sentido de la dirigencia estatal, para recobrar el terreno que perdieron en las elecciones municipales pasadas.

 

No hay que olvidar que de los 217 municipios que tiene la entidad, el partido tricolor solo obtuvo el triunfo en 85, treinta y dos ayuntamientos quedaron en manos de partidos de oposición al PRI.

 

Como quien dice: esto ya no puede esperar mucho. Los aspirantes a tener un puesto de diputado local, presidente municipal o regidores y síndicos, ya están en marcha. Si no empiezan a trabajar desde ahora, ya no tendrán tiempo de reunificarse y organizarse para triunfar.