Antes y durante la campaña electoral, circuló profusamente el rumor de que Blanca Alcalá, la candidata tricolor a la minigubernatura, habría sido enviada al matadero, dado que su derrota se había negociado previamente en las altas esferas de la política nacional. Esos rumores se acentuaron cuando PANAL y PT, en teoría bajo el control de Bucareli, se incorporaron a la coalición morenovallista que postuló a Tony Gali.

 

Entre muchos momentos desastrosos, es probable que Blanca nunca se repusiera de ese golpe, pues a partir de ahí ella misma comenzó a preguntarse si los rumores de su derrota pactada eran realidad. Con ese peso, hizo campaña y después se enredó ella misma con sus líos patrimoniales. La desconfianza nunca la abandonó, y esa falta de seguridad nubló su estrategia electoral, así como la defensa de los escándalos que se le atribuyeron.

 

Pero hubo algo peor: sus rivales tenían los bolsillos llenos de dinero.

 

Ayer y hoy, CAMBIO ha demostrado que Blanca Alcalá fue traicionada desde la Secretaría de Hacienda y que Luis Videgaray le clavó un cuchillo al enviar 11 % más de recursos federales a Puebla, pese al contexto de recortes presupuestales que vive México. Moreno Valle fue el único gobernador del país que no sólo esquivó los tijeretazos, sino que además recibió recursos extras por encima de la inflación.

 

Ese extra de recursos federales, además, no llegó por participaciones y aportaciones —que tienen una fórmula fija— sino por la firma de convenios, que es la forma de Hacienda de mandar recursos extraordinarios a los estados. La SFA esperaba 4 mil millones y, para el primer semestre del año, obtuvieron 12 mil millones, un 200 % más de lo calculado.

 

Pero ésta sólo es una parte de la historia. La segunda también la cuenta CAMBIO con las propias cifras del gobierno estatal y se refiere a cómo utilizó Moreno Valle esos recursos extras que le envió Videgaray para poder ganarle al PRI. La traición desde dentro.

 

Parece evidente pero no lo es: con más dinero federal, el gobierno morenovallista disparó el gasto de la administración en dos rubros específicos: Servicios Personales y Transferencia, Subsidios y apoyos. Los datos son muy claros para la senadora, quien ejerció de secretaria de Finanzas en el gobierno de Manuel Bartlett.

 

De acuerdo con el Informe de Avance de Gestión Financiera del primer semestre del año, la administración gastó 39 mil 800 millones de pesos, de los cuales destinó el 40 por ciento al rubro de “Transferencias, Asignaciones, Subsidios y otras Ayudas”, equivalente a 16 mil 518 millones. Este gasto fue superior en 21 %, casi 3 mil millones al mismo periodo del año anterior, cuando erogó 13 mil 657 millones, de acuerdo con el informe 2015.

 

El segundo rubro al que dedicó más dinero fue Servicios Personales, en lo que pese a la política de austeridad y despidos erogó 11 mil 983 millones, en comparación con el año anterior cuando gastó 9 mil 920 millones, un aumento del 20 %, alrededor de 2 mil millones.

 

Dentro del rubro “Asignaciones, Subsidios y otras Ayudas”, los subsidios que otorga el gobierno morenovallista fueron los que más crecieron en un ejercicio fiscal, pues pasaron de 171 millones en 2015 a 809 millones en 2016, un incremento del 370 % en apenas un año.

 

Posteriormente, las Ayudas Sociales también se dispararon al pasar de 4 mil 846 millones el año anterior a 5 mil 523 millones en el ejercicio actual, un incremento de 14 %, casi 700 millones de pesos.

 

El complot ahora es muy claro: con tanto dinero extra, Moreno Valle tuvo manga ancha para ejecutar los programas del “Todo Gratis” que le permitieron remontar su popularidad.

 

Gracias a Videgaray se pagaron las mochilas, tinacos, pañaleras, uniformes, agrokits, lentes, entrada gratis a museos y además, se paliaron las pérdidas que significaron la disminución de costos de las fotomultas, además de los reintegros a los usuarios cumplidos en los pagos a Agua de Puebla.

 

¿Pactó la derrota Osorio Chong al entregar al PANAL y al PT a la coalición morenovallista? Nunca lo sabremos.

 

¿Pactó la derrota Videgaray al enviar al gobierno morenovallista 11 % más de recursos federales que se tradujeron en tinacos, mochilas, pañaleras, uniformes y más? Seguramente.

 

Blanca fue sacrificable, pero el verdadero objetivo era liquidar a Beltrones. Lo lograron.

 

La traición desde el PRI mató al PRI.

 

Con esos amigos, para que querían enemigos.