Thursday, 18 de April de 2024

Viernes, 12 Febrero 2016 20:43

Francisco, el primer Papa en pisar el emblemático Palacio Nacional

En el histórico recinto, ubicado en el corazón de la capital del país, el Papa pronunciará el primer discurso de su visita a México



El papa Francisco se convertirá este sábado en el primer pontífice que visita el Palacio Nacional, uno de los edificios más emblemáticos de la capital mexicana, sede del Poder Ejecutivo y testigo privilegiado de importantes episodios de la historia de este país.


 


El histórico recinto está ubicado en el corazón de la capital del país y ha sido remodelado en numerosas ocasiones, por lo que conjuga elementos neoclásicos, barrocos y neocoloniales.


Tras la caída de Tenochtitlan, la capital del imperio azteca, Hernán Cortés ordenó la construcción del palacio en 1521 sobre las ruinas del Palacio de Moctezuma.


El conquistador español utilizó el palacio, entonces sólo de dos pisos y tres patios, como su segunda residencia privada y en 1562 su heredero, Martín Cortés, lo vendió a la Corona.


A partir de entonces se convirtió en la sede del virrey de la Nueva España hasta que en la última década del siglo XVII un incendio destruyó casi por completo el edificio, lo que llevó a las autoridades a emprender un proceso de reconstrucción a lo largo de una centuria.


En 1800, cuando albergaba la Casa de la Moneda, la Real Academia de Artes de San Carlos y el Jardín Botánico, un fuerte temblor sacudió la ciudad y causó graves daños al entonces Real Palacio, lo que obligó a una remodelación a cargo del arquitecto Manuel Tolsá.


A lo largo de tres siglos la construcción fue ampliada y remodelada por las administraciones de turno, las cuales pusieron su propio sello en el recinto.


Durante la lucha independentista (1810-1821) el edificio se deterioró por el abandono, pero fue rescatado por las fuerzas políticas emergentes para convertirlo no sólo en la sede del Ejecutivo, sino también de los nuevos poderes de la República: el Legislativo y el Judicial.


El dictador Porfirio Díaz, que gobernó el país de 1876 a 1911, fue el último que utilizó como residencia el Palacio, que remodeló con motivo de los festejos del centenario de la Independencia en 1910.


Actualmente, el edificio alberga la campana de Dolores, que se utilizó en 1810 en el Grito de Independencia, y la bandera del país.


Varias de sus áreas son utilizadas por el Ejecutivo federal y la Secretaría de Hacienda, además de que cuenta con museos y galerías.


En varios de sus muros están plasmadas las obras del artista mexicano Diego Rivera.


 


Fuente: Excélsior