Además de la ausencia de priistas, el desfile del 5 de mayo no contó con la presencia del presidente Enrique Peña Nieto, que en su lugar estuvo el secretario de Trabajo y Previsión Social, Alfonso Navarrete Prida, compartiendo banquillo con el gobernador Rafael Moreno Valle.
El desfile fue una pasarela política a la que llegaron asistentes como los secretarios de estado Diódoro Carrasco y Jesús Rodríguez Almeida, de Gobierno y de Seguridad, así como el alcalde Luis Banck y el senador Javier Lozano.
En este acto hubo bocadillos para los asistentes VIP y se caracterizó por promocionar la "Puebla Moderna", mediante un carro alegórico que exponía al público obras como la rueda de la fortuna, puentes vehiculares, ciclovías, entre otras.
Al redor de las 11.30 concluyó el desfile e inició la toma de protesta a los conscriptos.