Es claro que ni Anaya ni Moreno Valle son de los que olvidan; en absoluto. Al contrario son individuos que saben guardar los sinsabores para degustarlos en la mesa de la venganza, esa en que los platos se sirven fríos. Pero ambos saben que en este momento, por lo menos en esta fracción de tiempo, a ninguno de los dos les conviene un enfrentamiento que prolongaría el drama creado por Margarita Zavala de Calderón.

Lo que la señora logró fue un gran ‘Reality Show’ que tuvo sus minutos de fama, pero dentro de tres meses nadie se va acordar de la otrora militante panista.

En la elección del 2006 Felipe Calderón encabezó una reunión privada en la que aseguró: ‘Las guerras se ganan con dinero’. Y efectivamente los protagonistas de la vida nacional: los pivotes políticos y los empresarios que influyen en la esfera del poder saben que el dinero es el aceite que lubrica la maquinaria. Pero en el momento en que Margarita se convirtió en aspirante a candidata independiente las posibilidades de triunfo se diluyeron, se esfumaron. Y todos aquellos agentes de la élite que le prodigaban atenciones políticas y financieras van a desaparecer.

Nadie va a invertir en un proyecto independiente que no tiene futuro. Aquellos amigos que se ofrecían a financiar giras nacionales o pagar precampañas simplemente van a hacer mutis. Porque efectivamente los Calderón van al basurero de la historia.

Margarita es un globo que se desinflará de forma catastrófica.

En este contexto queda claro que Ricardo Anaya obtiene un triunfo contundente, propio de un depredador que no descansa hasta despedazar a su presa. Anaya logró sacudirse a su principal adversaria sin fracturar a su partido. Por favor, que nadie piense que la salida de la señora rompe al PAN. Sólo fue un drama, un berrinche que ni siquiera Marta Sahagún hubiera hecho. El ‘Margaritazo’ se diluirá en dos o tres meses.

En este escenario ¿Le conviene a Anaya desatar una nueva guerra, pero ahora en contra de Moreno Valle? En contrario sensu ¿Puede Rafael en este momento arrebatar a Ricardo una candidatura que ya tiene en la mano? 

A ninguno de los dos les conviene abrir una guerra, por lo menos en esta etapa. Todo indica que en las próximas semanas veremos el montaje de un sainete en el que se darán la mano. Porque Ricardo necesita de manera urgente de fotografías que lo legitimen luego del ‘Margaritazo’. Necesita del adversario interno que le levante el brazo, aunque lo haga con el estómago estrujado.

Por supuesto el consumado maestro de la negociación Rafael Moreno Valle pondrá el precio más alto a su colaboración. Pero que no apriete demasiado porque Ricardo no se pondrá contra la pared.

Es evidente que tarde o temprano Ricardo y Rafael habrán de romper esta guerra fría, tarde o temprano veremos un choque de trenes. Pero por lo menos en estos meses es claro que ambos pueden ganar más con un pacto que con una guerra.  

Esperemos a ver los indicios de una efímera paz.

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.