Con pancartas y consignas habitantes de este municipio exigieron mayor seguridad durante el tercer informe de gobierno del edil panista Rubén Martínez Castillo, exigencia que se da ante la ola de inseguridad que se vive desde hace un año y ante la nula acción de parte de las autoridades municipales.

Los inconformes interrumpieron el informe y entregaron un documento al alcalde y exigieron que se leyera en público y demandaron una acción inmediata del gobierno local, para que se implementen acciones para mejorar la seguridad y, combatir la ola de asaltos, robos y balaceras que se registran en la cabecera municipal, así como en las diversas comunidades donde los delincuentes hacen de las suyas.

Aunque no les permitieron leer el documento, reprocharon que los ciudadanos hayan tenido que conformarse en autodefensas para cuidar su patrimonio, ya que por las noches forman equipos que recorrer las calles del centro de esta población para brindar seguridad a la población.

Recriminaron al alcalde que en diversas ocasiones lo invitaron a dialogar con los ciudadanos para tomar acciones en conjunto para combatir la delincuencia y el edil jamás les hizo caso a pesar de que las invitaciones fueron por escrito.

Demandaron al edil y a su cuerpo de regidores y funcionarios que cumplan con su trabajo por el cual reciben una remuneración económica, producto de los impuestos de los ciudadanos.

Tras concluir la lectura del informe, un grupo de ciudadanos pidió el uso del micrófono para leer el documento, pero no se les permitió, por lo que de inmediato el edil panista Rubén Martínez Castillo, salió huyendo del auditorio municipal junto con sus invitados especiales y su cuerpo de regidores resguardados por la fuerza pública.

En el documento exigieron a las autoridades municipales que desempeñen eficientemente sus funciones y exigen que el día 16 de febrero el edil reciba a una comisión de ciudadanos para tratar el tema de la inseguridad que vive este municipio.