Un interno del penal de Tehuacán se quitó la vida colgándose de los barrotes de su celda, luego que desde hace meses ya no recibía la visita de sus familiares, hecho que le provocó una profunda depresión.
El interno fue identificado como Miguel Cuello Anastasio tenía 57 años de edad, originario de Tlacotepec de Porfirio Díaz y estaba sentenciado a 30 años de cárcel, de los cuales ya había purgado 15.
Fue el pasado 8 de marzo cuando empezó a recibir atención médica, debido a la depresión que experimentaba por no ver a su familia. A pesar de la promesa de su hijo de visitarlo, llevaba tiempo sin hacerlo, dejándolo en total abandono.
Son 100 los internos que se encuentran en condiciones similares por depresión debido a que han dejando de recibir visitas de sus familiares, los cuales son atendidos de depresión, informó el director del CERESO (Centro de Readaptación Social de Tehuacán). Por lo que hizo la invitación a los familiares de los internos para que los visiten y eviten que se sientan abandonados.