Una mezcla de tradición y deporte que consiste en arrancar la cabeza a un gallo vivo, se practican en algunos municipios como Cuapiaxtla de Madero, donde el público entre ellos niños; observan como las aves sufren y batallan por su vida, hay quienes consideran que se fomenta la violencia y maltrato animal.

El deporte involucra a varios gallos y permanecen varios minutos bajo los rayos de sol, son colgados de las patas sobre una cuerda que se extiende. En seguida, hombres en bicicleta uno a uno, intenta varias veces agarrar el ave por el cuello, hasta lograr arrancarle la cabeza.

Durante este tiempo las aves son martirizadas, terminan con las alas fracturadas y desplumadas, hasta que son sacrificadas. El primer participante en lograr desprender la cabeza, es considerado el ganador. Los premios del concurso consisten en llevarse el gallo muerto y bebidas embriagantes.

En el pasado solían utilizar un ganso con vida. Para hacer el deporte desafiante, el cuello de ganso era aceitado generosamente para que resultara difícil arrancarlo, el aleteo y la agitación constante del ave hacía muy difícil conseguir el objetivo a la primera.

Hay pobladores que no están de acuerdo con estos juegos y son considerados como -deporte brutal-  donde se fomenta la violencia en jóvenes y niños.  Esta tradición es parte de los festejos patrios y se practican después del desfile del 16 de septiembre de cada año.