Jennifer Flores ni fue secuestrada ni iba a ser “vendida” a tratantes como aseguraron sus familiares, pues en realidad, la adolescente se escapó de su casa para juntarse con su novio por lo que se fue a vivir a su casa en la colonia 3 de Mayo.
La Fiscalía General del Estado (FGE) descartó que se haya tratado de un plagio o un caso de trata de personas aunque aún hay dos personas que están rindiendo su declaración ante el Ministerio Público, entre ellos la pareja sentimental de la quinceañera.
Esta era la tercera ocasión en que la joven se escapaba de su casa, según la versión oficial. Cabe citar que tras diez días de “desaparición”, Jennifer le habló por teléfono a sus familiares para dar su ubicación y la primera versión que se manejó es que la habían secuestrado y que la iban a “vender” para explotación sexual.
Se descarta secuestro y trata de personas en el caso de la menor de 15 años localizada pic.twitter.com/74xb2bYbtA
— FGE Puebla (@FiscaliaPuebla) 23 de mayo de 2017