Martes, 23 de Abril del 2024

César Diego se convierte en segundo soldadito

César Diego se convierte en segundo soldadito
Viernes, 09 Junio 2017 01:55
Eduardo Sánchez Montero / @EduardoSMontero

El niño de 9 años de edad padece leucemia. Junto a su madre y hermanos recorrió las instalaciones de la Escuela de Sargentos.



César Diego Almaráz Pérez, de nueve años de edad, se convirtió en el segundo soldado Honorario del Ejército Mexicano en Puebla, tras su lucha de dos años contra la leucemia. El menor, acompañado por su madre, hermanos y el comandante de la XXV Zona Militar, Raúl Gámez Segovia, realizó una visita a las instalaciones de la Escuela de Sargentos.


El infante ingresó el pasado 12 de diciembre del 2014 al hospital y tras permanecer tres meses internado, fue diagnosticado con leucemia. Su salud se reporta como delicada, tiene un tratamiento a base de jarabes e inhaladores que le ayudan a contrarrestar el padecimiento en la sangre.


Hace un mes, tuvo su última sesión de quimioterapia y le fue suspendida debido a la pérdida de cabello, además sufrió un paro respiratorio por lo que su madre, Lucila Pérez Valencia solicitó al Ejército Mexicano cumplir el sueño de su hijo de ser militar antes de que pudiera ocurrir una desgracia.


Recorrido de las instalaciones


César realizó un recorrido por las instalaciones de la Escuela de Sargentos, donde en todo momento se encontró acompañado de un soldado que lo guiaba a través de los dormitorios, gimnasio y demás inmuebles. El pequeño vivió la experiencia de pertenecer a las filas del ejército.


Dos días antes tuvo que consultar a su doctor quien le autorizó la visita siempre y cuando evitara desgates innecesarios y permaneciera en reposo, por lo que en todo momento fue trasladado en una silla de ruedas hacia los distintos edificios que comprenden la escuela.


Aunque su madre mencionó que sus hermanos, Sandra de 11 años de edad y José de siete, se mostraban más emocionados, confiaba en que la visita pudiera levantar los ánimos de Diego para seguir luchando contra el cáncer que le provoca recaídas cada mes.


Lucila, madre soltera que sobrevive vendiendo gorditas


Después del diagnóstico de leucemia, Lucila enfermó y permaneció internada en el Hospital del Norte, sin embargo, abandonó el nosocomio para atender a sus hijos debido a que es madre soltera y no cuenta con el apoyo de su familia.


Lucila busca sacar avante a su familia con su puesto de gorditas ubicado en la calle 3 Sur Artículo 3 y calle Esmeralda en la colonia Minerales del Sur. El negocio es su único ingreso y a veces es apoyada por vecinos quienes le regalan despensas para poder alimentar a sus tres hijos.


“Hay veces que me siento derrotada y quisiera caerme pero tengo que ser fuerte porque si no, qué va a ser de mis pequeños, más que nada del que está enfermo”, expresó la madre de Diego durante el recorrido a la Zona Militar.