Park fue acusada por un voto parlamentario en diciembre de cargos de abuso de poder y no proteger a las víctimas del desastre del ferry de Sewol, en 2014.
Una investigación especial llevada a cabo por la fiscalía ya encontró 30 sospechosos acusados de delitos como soborno y forjar una lista negra cultural dirigida a artistas considerados críticos del gobierno.
Entre los nombres prominentes relacionados con el amplio escándalo está el vicepresidente del conglomerado de empresas Samsung, Lee Jae-yong, inculpado de pagar decenas de miles de millones de dólares para garantizar el respaldo estatal a una fusión de afiliados en 2015.
Por su parte, las manifestaciones a favor y en contra de la presidenta continúan, mientras grupos de simpatizantes agitaron banderas de Corea del Sur frente a la Corte, afirmando que su destitución era ilegal.
El histórico veredicto unánime por el panel de ocho jueces significa que Park es la primera líder elegida democráticamente en Corea del Sur en ser destituida desde que la democracia fue instituida en el país a fines de la década de 1980.
El Parlamento destituyó a Park en diciembre después de que millones de personas salieran a las calles para exigir su renuncia, luego de desatarse un escándalo político en el que se vieron involucradas ella y una confidente.
Ahora Corea del Sur debe celebrar elecciones en dos meses para elegir a su sucesor.