El ex alcalde capitalino, Eduardo Rivera Pérez ganó su primera batalla al grupo morenovallista debido a que consiguió no ser incluido en el Registro Nacional de Funcionarios Públicos Inhabilitados, lo que le da un respiro ante su intención de competir por un cargo de elección popular en 2018.

La resolución del Juez Tercero de Distrito en materia de Amparo señala que el nombre del panista no debe ser inscrito en dicho registro de Funcionarios Públicos Inhabilitados para evitar generar un daño irreparable hacia su persona e imagen.

Dicha sentencia responde al juicio de amparo 943/2017 interpuesto por Rivera Pérez luego que el pasado siete de abril los diputados en el Congreso local aprobaran la inhabilitación por 12 años y la sanción económica por 25 millones de pesos, por el daño patrimonial en el que presuntamente incurrió en 2013.

Lo anterior sucedió durante la primer audiencia celebrada por el caso de Eduardo Rivera en contra del Congreso del Estado y la Auditoría Superior del Estado (ASE) por las presuntas irregularidades que éste acusa se cometieron durante el proceso administrativo en su contra y por el cual en el Poder Legislativo se determinó su inhabilitación, misma que por ahora quedó sin efecto por orden del juez a cargo del proceso legal.

El juicio promovido por el ex edil de la capital poblana continúa bajo el amparo promovido por éste con el número de expediente 553/2017, en el que denuncia las presuntas irregularidades cometidas en el desahogo de la revisión de su cuenta pública correspondiente al año 2013.

El resolutivo del Juez Tercero de Distrito se da luego que el 12 de junio pasado, Eduardo Rivera Pérez anunciara que iniciaría diversas giras alrededor del estado para reunirse con panistas de otros municipios y gente de la sociedad civil con el ánimo de ganar adeptos que respalden sus aspiraciones políticas de cara a la elección del 2018.