En lo que va del año, son asaltadas al menos ocho gasolineras al día en la capital, aseguró el presidente de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), Rafael Zorrilla Alanís, por lo que exigió a las autoridades municipales reforzar la vigilancia en estos negocios.

En entrevista con CAMBIO, el empresario avaló la ‘megadeuda’ de 800 millones de pesos que busca concretar el alcalde Luis Banck Serrato, pues consideró que es necesaria para combatir la ola de asaltos en la capital.

Ante esto reconoció que Onexpo registró al cierre del mes de junio, un promedio de seis a ocho asaltos diarios en las estaciones de servicio, situación que adjudicó a la ola de violencia que se vive en la capital poblana.

“Es necesario que redoblen esfuerzos, estamos viviendo ahorita una ola impresionante de robos, imagina que el día de ayer (viernes) en el municipio de Puebla asaltaron a seis estaciones de agremiados de Onexpo, y así es todos los días”, dijo.

Señaló además que el modus operandi de los asaltantes es casi siempre el mismo, ya que aprovechan que por la madrugada no hay recurrencia de gente y llegan en bandas de al menos seis asaltantes armados para amagar a los trabajadores y llevarse el botín.

“Los delincuentes ya agarraron a las gasolineras como si fueran bancos o cajeros, entonces van y armados asaltan a los despachadores, entonces sí estamos viviendo un problema grave en Puebla”, agregó el empresario.

Zorrilla Alanís agregó que en julio los robos se siguen incrementando hasta en un 100 por ciento, por lo que exigió que en la inversión que pretende el Ayuntamiento en materia de seguridad, el gremio gasolineros sea tomado en cuenta.

“Es necesaria esta inversión, este endeudamiento para tener mejores equipos y equipar perfectamente bien a la policía municipal”, señaló.

Estaciones sufren desabasto de combustible

En otro tema, Zorrilla Alanís confirmó que hay desabasto en al menos 30 estaciones de servicio en el estado y que se debe a una situación de logística al interior de Petróleos Mexicanos (Pemex), que para evitar la perforación de los ductos, envió el combustible en pipas.

“El ducto está paralizado, mandan todo el combustible por medio de ruedas y esto pues hace que llegue menos cantidad de lo que puede transportar un ducto”, explicó en entrevista para este medio.

No obstante reveló que Pemex decidió hacer un cambio de personal, a fin de evitar cualquier caso de favoritismo en la repartición de combustible a las diferentes organizaciones petroleras en Puebla.