El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Montiel Solana dio a conocer que múltiples empresas de sus agremiados registraron daños aunque aún no cuentan con un saldo preliminar a consecuencia del sismo de 7.1 grados que se registró este martes en la entidad, cuyo epicentro fue en Chiautla de Tapia.

En entrevista telefónica con CAMBIO, el empresario aseguró que el edificio empresarial sufrió daños severos por lo que se tuvo que evacuar a todo el personal de las distintas cámaras empresariales sin registrar algún lesionado.

Agregó que en Amozoc una empresa dedicada al mármol sufrió fuertes daños, por ello se buscó de inmediato la manera de ayudar al agremiado, siendo éste el único caso grave que se reportó durante el sismo.

“Hay daños en el edificio empresarial, estamos esperando a que las autoridades y los especialistas hagan una valoración importante (…) no son daños menores son medianos (…) tenemos el reporte de un afiliado del sector marmoleo que sufrió fuertes daños en su empresa”, dijo.

El líder empresarial adelantó que pondrán a la disposición del gobierno las distintas empresas afiliadas al organismo para ayudar a las personas afectadas por el temblor, dado que se registraron daños en gran parte del estado.

“Nos ponemos a las órdenes y servicio de la autoridad para poder ayudar y establecer algún tipo de ayuda y ser solidarios como siempre cuando suceden este tipo de cosas somos rodos los mexicanos”, manifestó.

COE sin daños

Francisco Romero, presidente del Consejo de Organismos Empresariales (COE) en Puebla aseguró que tras el sismo ninguna de las empresas afiliadas a su organización sufrió daños estructurales.

Sin embargo reconoció que varios restaurantes tuvieron que cerrar debido a los asaltos que se realizaron después del temblor, dado que los delincuentes aprovecharon el caos en el que se encontraba la ciudad.

Este martes se registró a medio día un temblor de 7.1 grados, a pesar de que la magnitud fue menor al sismo de 8.2 grados registrado el pasado siete de septiembre, el epicentro se localizó en el Axochiapan, Morelos, lo que ocasionó que los daños fueran mayores en Puebla y el resto de los estados colindantes.