Este impasse debe ser una excelente oportunidad para que el morenovallismo se vea en el espejo y haga un examen de conciencia. Aún en el muy probable caso de que los tribunales fallen en favor de Martha Erika, es evidente que su gubernatura será extremadamente susceptible ante una oposición que no cejará de combatirla.

Nancy de la Sierra y Alejandro Armenta desde el Senado; Manzanilla desde San Lázaro; José Juan Espinosa en el Congreso local; además del frente que conforme Rodrigo Abdala, quien tendrá que acatar la línea que se dicte desde Palacio Nacional. Será una guerra a cuatro fuegos.

En ese escenario el morenovallismo debe replantear su estrategia, su forma de proceder y sus aliados. En el caso de que Martha Erika quede firme como gobernadora electa, es claro que algunas personas afines a su grupo serán insostenibles.

En primer lugar debe destacarse el nombre de Víctor Antonio Carrancá Bourget, quien ha sido señalado como el titular de la Fiscalía peor calificada del país.

Generoso lector, le invitamos a dimensionar esta evaluación; la peor Fiscalía, peor aún que las de Veracruz, Tamaulipas, Morelos o Guerrero. Estamos hablando de un desastre sin antecedente. El funcionario no es un activo del morenovallismo, al contrario, es un pasivo; es un agente que nada aporta, al contrario, sólo resta.

La crisis del morenovallismo reflejada el primero de julio, en buena parte se debe a la inoperancia de la Fiscalía General del Estado; una cueva de indolencia, incapacidad e inoperancia.

Los grandes sectores de la sociedad poblana, lo mismo vecinos de los fraccionamientos residenciales de la Angelópolis que los campesinos de las comunidades de la Sierra Negra, saben que recurrir a la Fiscalía y nada es exactamente lo mismo.

Los feminicidios, sin control alguno, son la reacción de una criminalidad que sabe de la apatía e insensibilidad de las oficinas ministeriales.

En uno de los momentos más críticos de la campaña se publicó un tuit: Si Carrancá no puede que renuncie.

Pero es evidente que el aludido no puede y tampoco renuncia. El doble crimen perpetrado en la zona de Huauchinango se suma al de decenas y decenas  de mujeres que han sido ultimadas y cuyas carpetas de investigación quedan bajo el polvo.

En un raquítico alegato en su defensa Carrancá asegura que recibió una dependencia ‘en ruinas’. En absoluto, abogado. La Fiscalía que usted deja es muy inferior a la Procuraduría que entregaron Rodolfo Igor Archundia, Víctor Pérez Dorantes, Lourdes Nares Rodríguez (a la sazón perseguida), Adolfo Karam, entre otros. Y no lo dice Cúpula, lo dicen decenas de agentes del Ministerio Público que tienen la antigüedad para aseverarlo.

El morenovallismo en ese examen de conciencia debe valorar el enorme, el descomunal costo social que tiene sostener a figuras como Carrancá.

Ojalá lo reflexionen.

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.