En los tiempos del priismo hegemónico, la FROC poblana siempre contaba con dos diputados, uno federal, uno local y con un regidor en el Ayuntamiento de esta capital, actualmente no tiene a ninguno.

 

Es por eso que la organización obrera busca por sus propios medios participar en elecciones federales y locales, en esta ocasión, lanzando candidatos a presidentes municipales y regidores en 35 de los 217 municipios de la entidad.

 

Los candidatos a los que apoyará la FROC serán de preferencia ciudadanos sin partido y serán lanzados a través del PRD y de Movimiento Ciudadano con el decidido apoyo de los trabajadores afiliados a la Federación Revolucionaria de Obreros y Campesinos.

 

Según nos informó el dirigente de la organización, Constantino Sánchez Juárez, hay trabajadores pertenecientes a la central que dirige, que tienen inquietudes políticas para servir a su comunidad y a sus compañeros y ellos contarán con el apoyo de todos los froquistas a fin de que la votación popular les sea favorable.

 

Trabajarán con base a una plataforma debidamente integrada a fin de que si triunfan, den buenos resultados en beneficio de la ciudadanía.

 

Sánchez Juárez dijo que no buscarán lanzar a sus candidatos por el PAN porque ese partido ya tiene decididas sus candidaturas, pero sí por el PRD y el MC partidos con los que incluso hay mayores coincidencias ideológicas.

 

Él todavía no ha decidido su participación en esta contienda. Esperará unos días más y entonces tomará una decisión al respecto.

 

Para observadores locales de los acontecimientos políticos, el PRI tendrá que proponer a la ciudadanía candidatos idóneos, tanto para la gubernatura, como las senadurías y las diputaciones federales y locales, así como los ayuntamientos para poder ganar la elección de este año.

 

Si el partido tricolor, dicen, no se esmera en la selección de sus candidatos y últimamente no ha tenido cuidado en ese aspecto, seguramente va  a perder.

 

Reconocen que hay descontento entre el grueso de la población por los numerosos problemas existentes en el país, que al parecer no son atendidos por las autoridades o están mal atendidos, como el de la seguridad, el del desempleo, el de la pobreza y pobreza extrema y el de la impunidad y la corrupción.

 

Estos problemas no tienen la misma importancia en todos los estados; hay unos donde la inseguridad y la delincuencia tienen índices muy elevados, así como el desempleo y la pobreza, en otros. El problema es la falta de coordinación de algunos gobiernos locales con el Gobierno federal es una de las fallas, principalmente para el combate a los delincuentes organizados.

 

 Pero el descontento que se observa entre la población de todos los niveles sociales es grande y eso puede propiciar un elevado porcentaje de abstencionismo en las elecciones próximas.

 

También hay molestia entre la ciudadanía por el bajo nivel de las precampañas que parecen estar destinadas al golpeteo entre candidatos y partidos.

 

No hay propuestas serias para dar solución a la problemática nacional y local, pero sí una guerra sucia o de lodo a través de las llamadas redes sociales y de medios de comunicación.

 

El descontento hacia los partidos y hacia los políticos es real y viene de hace varios años, pero se ha venido agravando debido a que nadie hace nada para eliminarlo o por lo menos, aminorarlo.

 

Luis Echeverría, ex presidente de la República durante el periodo 1970-76, fue hospitalizado hace unos días por un problema bronquial, pero hoy será dado de alta.

 

Se informó que a sus 96 años cumplidos goza de inmejorable salud.

 

Echeverría y José López Portillo fueron los dos últimos presidentes del periodo posrevolucionario. Luego vino Miguel de la Madrid que fue el intermedio entre la etapa posrevolucionaria y el neoliberalismo que encabezó Carlos Salinas de Gortari.

 

A partir de entonces se rompió el esquema con el que se venía trabajando. Se impuso el sistema económico neoliberal que ha propiciado la concentración de la riqueza en pocas manos, se incrementó la pobreza y las clases medias se vieron obligadas a bajar su nivel de vida.

 

Ernesto Zedillo se vio obligado a entregar el poder al PAN, partido conservador y principal adversario del PRI, partido de origen liberal, que permaneció en el poder durante dos sexenios, suficientes para agravar la situación general del país, ya descompuesta por los gobiernos neoliberales.

 

Todo lo que estamos viviendo es consecuencia de lo mismo. Hemos caído en el capitalismo-salvaje y ahora el país parece no tener rumbo y lo que es peor, no se ve ninguna luz al final del tunel.