Los padres de Iván Conde Vargas exhibieron la negligencia de la Fiscalía General del Estado (FGE), pues acusaron que los restos de su hijo fueron trasladados a la fosa común; a pesar de que existe una denuncia por desaparición desde el pasado 12 de junio del 2017, hasta el momento no les han entregado el cuerpo y desconocen la causa de muerte del masculino de 23 años.

El joven originario del estado de Morelos, estudiante del último año de la carrera de Psicología, desapareció el 5 de junio del año pasado y su cuerpo fue localizado dos días después en el municipio de Izúcar de Matamoros; sin embargo, se desconocen la causas de su muerte, ya que los familiares no han recibido el dictamen de la necropsia, por lo que aseguran que no le fue practicada a su debido tiempo.

Asimismo, Susana Vargas y Eleazar Conde, padres de Iván, se dijeron ‘revictimizados’ por parte de la FGE, pues no les dan razón de su hijo, quien permanece en una fosa común, a pesar de que ya fue reconocido por ellos a través de fotografías.

Joven ‘desaparecido’ lleva más de un año en la fosa común

El 5 de junio del 2017 fue la última vez que Susana Vargas y Eleazar Conde supieron de su hijo Iván, quien se encontraba en el último semestre de su carrera, ya que sólo le faltaba presentar su tesis.

Aunque comenzaron una intensa búsqueda de su paradero en redes sociales, nunca obtuvieron una respuesta favorable en los días subsecuentes, por lo que el 12 de junio de 2017 acudieron a las instalaciones de la FGE para presentar una denuncia por desaparición.

Desde ese momento comenzó el calvario de esta familia morelense, que encontró una fatal respuesta un año después, cuando en junio de este 2018 pudieron acceder a fotografías de expedientes de personas marcadas como desconocidas; entre ellas se encontraban las imágenes de su hijo, a quien identificaron por un lunar y una cicatriz, sin embargo, sus restos ya se encontraban en la fosa común desde hace un año.

“En la fiscalía no hemos tenido una respuesta favorable. Durante más de un año solicitamos ayuda y no tuvimos respuesta. Fuimos nosotros los que encontramos el cuerpo de mi hijo”, aseguró con indignación el padre del estudiante, preguntándose cómo era posible que la dependencia a cargo de Víctor Carrancá no pudiera establecer el nexo entre el cuerpo encontrado y la denuncia que se interpuso cinco días después de su descubrimiento.

Mientras que Susana Vargas se mostró inconforme respecto a que el cuerpo de su hijo aún no les haya sido entregado, a pesar de que la FGE supuestamente cuenta con los mejores laboratorios del país, por lo que sospecha que la dependencia no tiene la necropsia de ley, ya que no se les ha informado la causa de muerte del joven de 23 años.

“No hicieron la necropsia adecuadamente. Es un asco lo que hay en las carpetas, porque nos obligaron a entregar documentos en el área de la Salud. Pedimos que ya no permitan este tipo de aberraciones, somos seres humanos”, sentenció la madre del joven, Susana Vargas.