El centro de estudios InSight Crime confirmó que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se asentó en Puebla a partir de noviembre del 2017 –a la par del asesinato del líder huachicolero Jesús Martín Mirón López ‘El Kalimba’– y arribó con el propósito de disputarse el robo de combustible con células de ‘Los Zetas’.

Esta fundación dedicada al estudio sobre el crimen organizado en Latinoamérica dio cuenta de que en la entidad el grupo liderado por Nemesio Oseguera ‘El Mencho’ ha ocupado estrategias que han sido implementadas en otros estados para hacerse del control total de la ‘plaza’.

Entre las tácticas utilizadas por el CJNG destaca una supuesta ‘limpia’ de sus opositores, además de propagar mensajes a través de mantas, tal como ha dado cuenta CAMBIO en los últimos meses.

2017, incursión del CJNG en Puebla

El 30 de octubre del año pasado fue considerado el día más violento del 2017 ya que en menos de 12 horas fueron asesinadas una docena de personas en tres municipios distintos, entre ellos ‘El Kino’ y ‘El Kalimba’, líderes de ladrones de combustible en Tlaltenango y el Triángulo Rojo, respectivamente.

Este hecho significó el ingreso del CJNG, quienes se hicieron presentes con la colocación de narcomantas con amenazas contra funcionarios públicos y las células de Los Zetas que operan en la entidad.

InSight Crime destacó que la incursión del CJNG en la Angelópolis y las zonas conurbanas desahogó la presión militar que existía en la zona del Triángulo Rojo pues los líderes huachicoleros que no operaban para Los Zetas, se convirtieron en aliados de la nueva organización que iniciaba operaciones en tierras poblanas.

“En ese lugar (la capital poblana), mucho más mediático que las zonas rurales donde operaba en simbiosis con los ladrones de combustible, el CJNG realizó ataques contra grupos rivales en una nueva –pero ya habitual– guerra por la plaza”, se señala en el estudio ‘Así es como el Cártel Jalisco Nueva Generación se está expandiendo en México’.

Este hecho confirma la presencia del grupo delictivo, después de que la Administración para el Control de Drogas (DEA) –por sus siglas en inglés– señalara que Puebla era parte de la expansión del cártel que tiene presencia en 22 de las 32 entidades federativas del país.

Estrategias aplicadas en Puebla por el CJNG

Este mismo estudio señala cuáles han sido las estrategias aplicadas en cada uno de los siete estados, en los que su poder es absoluto, al apropiarse totalmente las plazas de Baja California, Jalisco, Michoacán, Gurrero, Guanajuato, Oaxaca y Veracruz.

Independientemente de que el objetivo del CJNG es el allegarse de recursos con la venta de combustible ilícito obtenido de las ‘ordeñas’ de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), su forma de operar es muy diferente a la de Los Zetas ya que el grupo del occidente busca hacerse del favor de la sociedad.

Alianzas con fuerzas de seguridad, acciones propagandísticas, participación en desapariciones, inserción en conflictos preexistentes de otros grupos criminales, exhibición de poder, discurso y acciones de autodefensa y combates a delitos predatorios son las maniobras implementadas por el CJNG para consolidarse en los estados.

En Puebla al menos han ocupado cuatro de estas estrategias. La primera de ellas fue la inserción en conflictos preexistentes, ganándose el favor de los huachicoleros regionales quienes se veían extorsionados por Los Zetas, de tal forma que se posicionaban en el negocio del huachicol y desplazaban a las demás células.

Con las narcomantas y los cadáveres abandonados en la capital poblana, el CJNG aplicó otras tres estrategias, la de las acciones propagandísticas, combate a delitos predatorios y los discursos de autodefensa, pues en sus mensajes señalaban que no harían daño a gente inocente, mujeres y niños, además se trataba de una ‘limpia’ en contra de delincuentes y funcionarios corruptos.

De tal forma se han posicionado como un grupo ‘rebelde’ fuera del sistema, que busca acabar con la delincuencia a pesar de que sus principales recursos provienen de acciones fuera de la ley.