Exige Jauli al TEC restitución de velódromo

 

Se pierde una inversión de ocho millones de pesos y un espacio deportivo único en el estado

 

Edmundo Velázquez


El Tecnológico de Monterrey Campus Puebla se negó desde hace más de un año y medio para llevar a cabo la restitución del velódromo construido con fondos federales y estatales por el Instituto Poblano del Deporte en el sexenio de Manuel Bartlett. Con esto se perdieron al menos ocho millones de pesos, monto total de la inversión.

Salomón Jauli, director del Instituto Poblano del Deporte, denunció la falta de sensibilidad de la institución educativa en entrevista para CAMBIO. Aseguró que el director general del Campus Puebla, Rashid Abella Yunes, nunca brindó una solución para que el velódromo fuera rescatado.

CAMBIO siguió el caso desde junio del año pasado, cuando a la instalación deportiva se encontraba ya sin la carpeta del circuito, con las vallas y parte de las gradas derrumbadas, la zona de vestidores inundada de tierra, agua y lodo. Del velódromo sólo quedaba el cascarón de la pista.

Según señaló Salomón Jauli, ahora ya existe maquinaria trabajando sobre el área que antes ocupaba la instalación deportiva, donde se erige ahora un centro de cómputo que complementará el complejo arquitectónico de la institución.

Al momento, la Dirección de Mercadotecnia y Comunicación del Tecnológico de Monterrey Campus Puebla se reservó una opinión sobre el tema. Se informó que Carlos Barradas, vocero de la institución, y Abella Yunes se encuentran reunidos para la elaboración de una versión oficial sobre el tema.

Al respecto, Salomón Jauli explicó que incluso Darío Carmona García, secretario de Educación Pública, sirvió como mediador para una reunión entre la institución y el Instituto Poblano del Deporte, de la cual aún no reciben respuesta alguna:

“Nosotros les propusimos modernizarlo, y que se les quedara. Para que pudieran practicar las selecciones infantiles y juveniles. Pueden usarlo incluso con sus alumnos, ésa era la oferta. Pero a la fecha no hicieron nada, no nos dijeron nada, ahora lo derriban”, comentó. —¿Cómo fue el trato con la institución? —Se le preguntó a Jauli.

—Pues hablamos con el director general del campus, Rashid Abella Yunes, tuvimos una plática, no fue un pleito. Fue hace año y medio. El secretario de Educación Pública. Sirvió de mediador. No dieron ninguna respuesta.

La versión del Tec

A pesar de que desde hace más de seis meses la institución aseguró —a través de su vocero Carlos Barradas— que simplemente el predio fue brindado por el Gobierno del estado con todo lo que se encontraba en su interior, Salomón Jauli desconoce cómo es que se haya dado la adquisición del predio.

Después de que Mario Alberto Mejía publicó el tema en La Quintacolumna (13 de junio del 2006), Carlos Barradas platicó con CAMBIO para explicar que dentro del predio se encontraba el velódromo, y que este era ya propiedad del campus.

Barradas explicó que la institución simplemente hizo uso del predio otorgado, y que este incluía la instalación deportiva, por lo que el Tecnológico de Monterrey podría hacer el uso que deseara más conveniente de la totalidad de los espacios.

Inpode no puede proceder legalmente

A pesar del desperdicio de recursos, el propio Jauli aseguró que no puede hacer nada para que la institución se retracte, pero que se mantendrá evidenciando la poca sensibilidad de quienes dirigen el Campus Puebla y su total negativa a trabajar en conjunto al Instituto Poblano del Deporte (Inpode).

“Lo que hacen es un desperdicio de fondos. Para el ‘94 o 95, en la época de Manuel Bartlett, con dinero estatal y federal, nosotros construimos el velódromo. Los señores del Tecnológico de Monterrey están cometiendo un error por tirar dinero estatal y federal, dinero que ni siquiera ellos gastaron. Destruyendo una pieza que era única, el velódromo era el único en el estado.

—¿Procederá legalmente?

—No puedo actuar legalmente. Lo digo públicamente, se está cometiendo una arbitrariedad. Eso es lo único que puedo hacer. Que la escuela lo retribuya. Pero no puedo hacer nada. Sí tengo el coraje que me da, es que no es posible que desperdicien el dinero para que nuestros chamacos tengan un velódromo. Esos terrenos, no sé cómo se hayan dado, pero el velódromo era en esa época un gasto de 8 millones. Ahora tengo que ir a México a entrenar al velódromo del DF porque acá, pues se está derrumbando.

—¿Sabe cómo se encuentra ahora el velódromo?

—Pues cuando pasaba por el lugar se podían ver camiones de volteo. Lo iban a arreglar, pensaba. Pero no, lo están derrumbando. —¿Entonces no existen algunos recursos legales para su recuperación?

—Legalmente no se puede hacer nada. Pero lo voy a seguir evidenciando. Me costó mucho tiempo hacerlo. Participó incluso el presidente Zedillo. Puebla nunca había tenido una instalación así. Lo que se pide es la restitución, que nos den para hacer otro. Vaya, que se lo den al gobierno poblano.

Recordemos que aún siendo gobernador Melquiades Morales Flores ordenó la donación de 25 hectáreas a favor del Tecnológico de Monterrey, incluyendo el predio donde se encontraba el velódromo construido por Manuel Bartlett Díaz al final de su sexenio.


 
 
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