Ángel Ramos rentaba canchas de La piedad


Instalaciones rentadas en mil 200 pesos de las 8 de la mañana a las 4 de la tarde, y de 6 a 8 de la noche en mil 500 pesos


Héctor Hugo Cruz Salazar

 

Cobros indebidos, abuso de autoridad y desviación de recursos públicos son algunos de los delitos que cometiera el ex futbolista Ángel Ramos como administrador de las canchas deportivas La Piedad, pues por más de un mes cobró ilegalmente a quienes querían utilizar las canchas de fútbol, voleibol y básquetbol, de uso público tras ser inauguradas por el gobernador Mario Marín Torres el pasado dos de diciembre, revelaron fuentes del Ayuntamiento a Cambio.


Los informantes señalaron que se analizan las denuncias de vecinos y algunos usuarios del inmueble para determinar si se procede contra el ex administrador del deportivo La Piedad ante la Sedecap u otra instancia. Desde el pasado viernes 12, personal de la Comuna controla y administra el inmueble que ilegalmente había retenido la administración marinista, a través del Instituto Poblano del Deporte.


El día de la inauguración de las canchas, el gobernador —en su mensaje— aclaró que las canchas son para todos los vecinos de la zona, y que por su uso no se cobra nada.


No obstante, Ángel Ramos —a decir de vecinos y usuarios— cobraba por rentar las canchas, y a través de una escuela de fútbol para niños pedía cuotas de inscripción y mensualidades para que utilizaran el espacio tres veces por semana.


Cambio obtuvo una copia de algunos documentos que detallan y confirman los cobros que hacía Ramos por el deportivo La Piedad.


Las canchas de fútbol eran rentadas en mil 200 pesos de las 8 de la mañana a las 4 de la tarde, y de 6 a 8 de la noche en mil 500 pesos. Por partido de fútbol —con árbitro incluido— cobraba mil 450 o mil 750 pesos, dependiendo el día y la hora del juego. Además, por ocupar una hora cada una de las canchas de básquetbol y de voleibol recaudaba 500 pesos.


Asimismo, a través del Centro de Formación La Piedad, Ángel Ramos pedía inscripciones de 250 o 350 pesos, además de mensualidades por 300 pesos. Sobra decir que los pagos no fueron registrados ni ante la Tesorería Municipal ni ante la Secretaría de Finanzas, así que se presume que el dinero está en las bolsas del administrador.


Vecinos entrevistados por este medio señalan que durante los más de 40 días que Ángel Ramos administró el campo deportivo nunca les dejaron utilizar las canchas o ingresar por lo menos al inmueble, si no pagaban sus respectivas cuotas, aunque la promesa del mandatario es que son para los vecinos: “Ángel Ramos siempre fue prepotente con nosotros, y nos decía que le hiciéramos como quisiéramos, pero que teníamos que pagar como todos las canchas para usarlas. Que no teníamos ningún privilegio por ser vecinos de la zona, y que si queríamos lo denunciáramos, pero que no le iban a hacer nada porque era compadre del gobernador, y que él lo había puesto en ese cargo (de administrador)”, señaló un vecino.  


Además, comentaron que Ramos utilizó las canchas pagadas con recursos del erario estatal como una empresa privada, ya que hizo convenios de renta de las instalaciones con escuelas privadas y particulares de fútbol a fin de que sirvieran como espacios de entrenamiento de sus respectivos equipos.

 

Protestan vecinos; Ramos
les “echa” a la estatal


Precisamente la prepotencia de Ángel Ramos y la exigencia de un pago para el uso de las canchas motivaron a un grupo de vecinos para realizar una manifestación en las afueras del inmueble la noche del pasado jueves 11 de enero.


Una veintena de personas con pancartas se apostaron afuera de las canchas para hacer cumplir las promesas del gobernador de no cobrarles un peso para usar el inmueble.


La respuesta de Ángel Ramos no se hizo esperar.


El administrador del deportivo La Piedad pidió el auxilio de la Policía Estatal bajo el argumento de que un grupo de “vándalos” quería tomar el inmueble, aunque los manifestantes estaban afuera, y había menores de edad.


En menos de 15 minutos, cinco camionetas de la corporación estatal llegaron al lugar. En total 45 uniformados —con armas largas, cascos, toletes y hasta escudos— se apostaron en el inmueble y generaron todo tipo de reacciones entre los quejosos. Desde la rabia de los padres hasta el miedo de los niños.
Los uniformados, cabe decirlo, no hicieron nada, y tras media hora de diálogo entre los quejosos y el administrador optaron por retirarse del lugar.

 

La Comuna toma el control
del Deportivo La Piedad


Tras la manifestación y el intento de represión de Ángel Ramos hacia los vecinos, el Ayuntamiento de Puebla determinó enviar personal del recién creado Instituto Municipal del Deporte para recuperar el inmueble, que ilegalmente el Gobierno estatal retuvo, a través del IPD.


El viernes 12 de enero los empleados del Ayuntamiento exigieron a Ramos entregar formalmente las instalaciones y dejar en sus manos la administración del inmueble. El ex futbolista se negó en primera instancia, pero cedió por la presencia de un notario público que daba fe de los hechos.


La entrega-recepción de la administración del inmueble se realizó a cuenta gotas y Salomón Jaula Dávila, titular del IPD —según revelaron algunas fuentes a Cambio — llegó al lugar para convencer a los representantes del Ayuntamiento y que dejaran en manos de su dependencia la administración del inmueble. Pero su tentativa no prosperó, y la Comuna administra desde ese día las canchas y cancela todo tipo de cobros, además de que se congelaron los convenios realizados por Ramos en tanto no se realiza un análisis de las denuncias correspondientes

 

Comuna y estado se
disputan las canchas

 

El pasado 2 de diciembre, en la inauguración del Deportivo La Piedad, el Gobierno estatal desconoció un convenio con el Ayuntamiento de Puebla para la administración de las nuevas canchas en la zona, pues en el evento no participó funcionario o empleado municipal, además de que Javier García Ramírez, secretario de Desarrollo Urbano, aseguró que el espacio es del Gobierno debido a que el Ayuntamiento se lo dio en comodato.


El lugar es propiedad de la Comuna capitalina, y el convenio consistía en que después de la inversión, el Ayuntamiento se encargaría de la administración del lugar.


No obstante, desde el 2 de diciembre se hizo a un lado a la Comuna capitalina de este proyecto, y pese a que, según las mismas fuentes, el terreno es propiedad del Ayuntamiento, ni siquiera se invitó a alguna autoridad del Gobierno municipal para la apertura.


Luego de no reparar en reconocimientos al trabajo de su jefe durante el discurso, Javier García Ramírez, titular de Obras Públicas, se deslindó de la administración de las canchas de fútbol al asegurar que a la Seduop sólo le corresponde realizar obras, y luego se le entregan Instituto Poblano del Deporte.  
Pero dijo estar seguro de que el terreno fue donado en comodato al Gobierno del estado por parte del Ayuntamiento, razón por la cual, el terreno es de la administración estatal:
“En términos de ley, para poder construir una cancha en cualquiera de los municipios, uno de los compromisos es que se dé en comodato. El terreno para que podamos construir, el Ayuntamiento lo dio en comodato, el Gobierno del estado ya es el dueño”, indicó:
—Hay versiones del propio Gobierno de que la administración marinista incumplió un convenio con el Ayuntamiento para la administración del lugar. —Se le inquirió.
—Desconozco lo del convenio. Construyo, y se la dejo al Instituto Poblano del Deporte, y ellos saben quién lo administra. —Contestó el funcionario.
Aunque, el lunes 4 de diciembre, el alcalde Enrique Doger Guerrero dijo que si el Gobierno del estado no le reintegraba al Ayuntamiento el predio de La Piedad, que se le entregó en comodato para la construcción de un polideportivo, habrá un “conflicto severo”, pues se violenta lo aprobado por el Cabildo el pasado 4 de mayo.
El alcalde comentó que no tenía conocimiento de que el Gobierno estatal ya había terminado la obra en el predio de La Piedad, pues no fue invitado a la inauguración, pero señaló que el terrero es propiedad de la Comuna, así que no está en discusión si lo quieren reintegrar o no.
Doger Guerrero explicó ayer el acuerdo con la administración marinista: “No sé por qué no fuimos invitados, en efecto recibimos una solicitud hace varios meses. Lo tratamos en Cabildo y en un predio que es de la ciudad, donde está ubicado el panteón de la ciudad; se autorizó la construcción de un polideportivo y así está en el acta de Cabildo, con el compromiso de que la administración correspondería al Ayuntamiento. Al mismo tiempo también les donamos un predio en la junta auxiliar de Romero Vargas, ése fue el intercambio. No sabemos las razones por las cuales no fuimos invitados, el Gobierno del estado construyó el polideportivo y tenemos entendido que quedó bien y nosotros nos haremos cargo de la administración como se dijo”, señaló el alcalde.
—¿Es ilegal que el Gobierno estatal administre el campo?
—Es que no es propiedad del Gobierno del estado. Es del Ayuntamiento.
—¿Sabe por qué no lo invitaron?
— Eso habrá que preguntárselos, no sé, pero así son las cosas.
Cabe decir que de acuerdo al acta de la sesión de Cabildo del pasado 4 de mayo, los regidores aprobaron “la incorporación al Programa de Obras del Gobierno del estado de Puebla el inmueble propiedad del dominio público municipal denominado Campo Deportivo La Piedad (…) para la construcción del Polideportivo 475”, según reza el considerando primero del dictamen presentado.
En el cuarto del mismo dictamen se señala: “Inicialmente la supervisión del Polideportivo 475 estará a cargo de la Dirección de Fomento Deportivo y Cultura Física, adscrita a la Secretaría de Desarrollo Social del Municipio de Puebla, y una vez publicado el Decreto de creación del Instituto Municipal del Deporte de Puebla, en el Periódico Oficial del Estado, la supervisión estará a cargo de éste”.

 


 
 
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