Perdona la Iglesia ... y pide perdón

Descarta prelado problemas políticos por irrupción a Catedral; sigue denuncia su curso

Leslie Gómez / Agencia Reforma

La Iglesia católica ya perdonó a los lopezobradoristas que irrumpieron en la Catedral Metropolitana hace una semana y ahora les pide que también ellos la perdonen por sus "errores".

"La Iglesia es signo de perdón y ellos también que nos perdonen", pidió el Obispo auxiliar de la Ciudad de México, Antonio Ortega Franco, quien en ausencia del Cardenal Norberto Rivera ofició la misa de mediodía en el templo que estuvo cerrado del domingo 18 al sábado 24 de noviembre.

"La Iglesia también tiene muchos problemas, errores, entonces el perdón debe ser mutuo", agregó, sin detallar a cuáles se refería.

El prelado descartó que sea un problema político el originado a raíz de que los activistas reclamaron que el prolongado tañer de campanas era una provocación a la asamblea de la Convención Nacional Democrática que ese día encabezó Andrés Manuel López Obrador en el zócalo capitalino.

"No es ningún problema político (...) a todos nos ha tocado llegar a tocar fondo, y decimos 'ya basta no puedo vivir así'. Todos en un momento tocamos fondo porque nos falta el pan, no sólo el material, sino el del consuelo, del apoyo, de que alguien nos dé una esperanza en nuestra vida.

"Les agradecemos a todos los partidos políticos, yo como obispo estoy comprometido a trabajar con aquello que mi País necesita, sea con el dirigente panista, priista o perredista, eso no importa", afirmó.

A pesar del perdón otorgado, las denuncias de hechos presentadas por el abogado de la Iglesia y el PRD siguen su curso.

En Guanajuato, el Arzobispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, se dijo ayer a favor de que la Iglesia perdone a los activistas, pero también de que se aplique la justicia contra ellos.

'HAY UN RENCOR'

La Arquidiócesis de México atribuyó ayer estos hechos a la división social generada tras el resultado de la elección presidencial de 2006.

"La división provocada por los resultados electorales ha ido enfrentando a distintos sectores y algunos han buscado enemigos con quién profundizar la herida y radicalizar el desencuentro.

"En el fondo hay un rencor que no atina a quién dirigirse, pero que finalmente ha llegado al punto más grave: irrumpir de manera amenazante y violenta una celebración religiosa", señaló en la editorial de su semanario, Desde la Fe.

La publicación sostiene que el enfrentamiento se ha alimentado "artificialmente" contra el Cardenal Rivera, pero reconoce la actitud del PRD de deplorar los hechos y exigir que se investiguen.