Penosa clasificación del TRI al hexagonal


Cae la selección 1-0 ante Honduras con autogol de Osorio


De la Redacción / Apro

 

Notas Relevantes

La chiquillada puede regresar al Puebla

Notas Anteriores

No obstante haber perdido 1-0 ante Honduras, México calificó al hexagonal final de la Concacaf como segundo lugar de su Grupo (2), debido a su mejor diferencia de goles respecto de Jamaica.


El único gol del partido lo convirtió Ricardo Osorio —del Stuttgart, de Alemania— en su propia meta a los 51 minutos.


Y desde entonces el juego resultó un suplicio para las huestes del sueco Sven Goran Eriksson, que durante la primera parte logró mantener cierto equilibrio en el juego.


Internacionalmente, la Selección de México, que sigue sin mostrar un juego colectivo, camina para atrás en la zona de Concacaf, donde apenas fue capaz de rescatar un punto de seis posibles.


Pero a partir de hoy comienza un serio dolor de cabeza para los aficionados mexicanos, pues el Tri deberá luchar por una de las tres plazas en juego rumbo a Sudáfrica con seis selecciones de la zona.


“Fue una noche muy difícil”, sintetizó el defensa mexicano Carlos Salcido, al final del juego disputado en San Pedro Sula, donde el anfitrión terminó con 12 puntos contra 11 de México y 11 de Jamaica (que en el mismo horario superó 3-1 a Canadá).


Para colmo, el representativo tricolor terminó con nueve hombres por las expulsiones consecutivas de Gerardo Torrado y Carlos Vela, a los 86 y 88 minutos, y por ello se perderán el primer juego del hexagonal final.


De todas maneras, el equipo dirigido por Eriksson ofreció un juego lamentable, con un sistema indefinido y falta de ideas que jamás puso en riesgo la meta del conjunto local, salvo el remate al travesaño que impactó el naturalizado argentino Matías Vuoso, al minuto 47 luego del cobro de un tiro de esquina de Andrés Guardado.


El partido parecía controlado, hasta que un infortunio del zaguero Ricardo Osorio —que estiró la pierna para encajar el gol en su propia meta, incrustando el esférico en el ángulo superior izquierdo de Oswaldo Sánchez— terminó por desdibujar la endeble fortaleza del equipo mexicano.


Lo que siguió después fue un dominio absoluto de los hondureños, que incluso estuvieron a punto de ampliar la ventaja.
“Después del autogol nos descontrolamos un poco. Es lamentable, sabemos que nos ha costado rescatar puntos de visita, pero hay que estar mentalmente tranquilos”, subrayó Salcido.


El partido, por cierto, se jugó bajo una torrencial lluvia, condiciones que, paradójicamente, parecieron afectar sobre todo a los hondureños.

 

 

 

 

Copyright 2008 / Todos los derechos reservados para M.N Cambio /


 
 
Todos los Columnistas