Perdona Arquidiócesis de Puebla al cura libidinoso

Resuelven que el sacerdote Severiano Méndez Hernández puede regresar a la comunidad de Atoyatempan

Nuevamente, un grupo de unos 150 pobladores de Atoyatempan se manifestaron en el patio de la Curia del Arzobispado, para volver a pedir al arzobispo Rosendo Huesca y Pacheco que autorice el retorno del presbítero al pueblo

Olivia López Pescador

El sacerdote Severiano Méndez Hernández podrá regresar a la comunidad de Atoyatempan durante uno o dos meses a despedirse de los fieles católicos, limpiar su imagen y a concluir sus asuntos pendientes, si así lo desea, una vez que esto fue acordado entre la Arquidiócesis de Puebla y la comisión conformada por personas del pueblo que lo respaldan, así lo anunció Rafael Amador Tapia, vicario general.

Nuevamente, un grupo de unos 150 pobladores de Atoyatempan se manifestaron —en medio de cantos y rezos— en el patio de la Curia del Arzobispado, para volver a pedir al arzobispo Rosendo Huesca y Pacheco que autorice el retorno del presbítero al pueblo, ya que insisten en que el padre es inocente y ha contribuido en mucho para la evangelización de la comunidad, por lo que niegan que éste haya practicado exorcismos.

Al concluir la reunión privada entre las autoridades del arzobispado y una comisión de vecinos de Atoyatempan, el vicario general fue el encargado de dar a conocer al pueblo el acuerdo tomado, por lo que dijo lo siguiente: “Se les informó a los miembros de esta comisión que el padre Severiano ha presentado su renuncia a la parroquia, pero esta renuncia hace que tengamos que hablar primero con el padre Severiano sobre la petición de sus feligreses de regresar uno o dos meses a la parroquia.

“Por ese motivo, tan pronto regrese a la ciudad el párroco, hablaran autoridades del arzobispado y el propio pueblo, y si el padre Severiano desea regresar dos meses a Atoyatempan a arreglar las cosas pendientes, podrá hacerlo. Esperarán a que regrese el padre, para que él tome la decisión, si desea regresar a la comunidad o no.”

Eugenio Lira Rugarcía, director de la Comisión Diocesana de Comunicación Social (Codicos) explicó que se acordó que el sacerdote Severiano sea quien decida si es conveniente regresar a Atoyatempan, para ello, se le darán facilidades para que regrese, pero la decisión está en sus manos, sobre todo porque hay un grupo que está en su contra.

Debido a que no se han podido comunicar con el religioso, porque de acuerdo a versiones de sus familiares no se encuentra, volverán a buscarlo para notificarle dicho acuerdo.

Cabe recordar que hace algún tiempo, un pequeño grupo conformado por alrededor de 25 personas, exigieron la remoción del párroco, debido a que lo acusaban de practicar exorcismos y de haber cometido abusos sexuales. No obstante que había sido removido de su cargo, para evitar divisiones en la comunidad, debido a que la mayoría del pueblo respalda al clérigo Severiano Méndez y hasta el momento no existe ninguna denuncia formal en contra de éste, ni la Iglesia católica ha encontrado ninguna prueba que comprometa al padre, por ese motivo, no existe ningún impedimento para que retorne a la comunidad.

Mientras, una comisión de ocho personas de Atoyatempan, conformada por representantes de la “Vela perpetua”, “Escuela de la Cruz”, “Rosarios Guadalupanos”, “Jóvenes de Ahuatepec” y dos personas de Puebla, fue recibida por Herminio Vázquez, secretario canciller del arzobispado; Rafael Amador Tapia, vicario general; Eugenio Lira Rugarcía, vocero de la Arquidiócesis y Jesús Ramón Rodríguez Guardado, abogado de la Arquidiócesis, para presentar sus peticiones.

Otro grupo bastante numeroso de fieles se dio a la tarea —durante el espacio de dos horas 20 minutos que duró la reunión— de rezar el rosario completo y de entonar cantos religiosos.

Era la una de la tarde cuando los manifestantes procedentes de Atoyatempan, Ahuatepec, Tepeyahualco, Santa Ana Coapan, entre otras comunidades (que eran atendidos espiritualmente por el párroco Severiano Méndez), arribaron al edificio de la Curia, dispuestos a pedir de manera pacífica y rezando el retorno de su párroco. Acompañados de pancartas y mantas, cuyas leyendas decían: “Grupo de catequistas piden el regreso del padre Severiano”, “señor obispo abra los ojos ante la verdad”, “señor obispo si usted le hace caso a 25 personas, usted dividirá el pueblo”, “Pedimos suplicantes se nos conceda el retorno del padre Seve”, “Queremos de regreso al padre Severiano”, “los que apoyamos a nuestro sacerdote, somos católicos auténticos, por eso exigimos el regreso del padre Severiano”, entre muchas más.

Después de poco más de dos horas de espera, en medio de rezos del rosario y de entonar cantos religiosos, les fue informado a los creyentes que el padre Severiano Méndez Hernández podrá regresar a la comunidad, sólo si así lo desea el párroco, pero por espacio de dos meses para despedirse de los fieles.

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