Abstencionismo ganará el 5 de julio: Meyer


Considera a Enrique Peña Nieto el “huevito del dinosaurio” del PRI


Advierte el prestigiado analista político que el PRI podría regresar a Los Pinos en el 2012, y no gracias a su esfuerzo partidista, sino a la decepción y a la desconfianza generada por los gobiernos de Acción Nacional

 

Selene Ríos Andraca

 

El investigador del Colegio de México, Lorenzo Meyer Cosío, advirtió que durante las próximas elecciones del 5 de julio para renovar a los integrantes de la Cámara de Diputados habrá un nivel de abstencionismo del 65 por ciento, debido a la desconfianza que tienen los mexicanos en las autoridades que hoy gobiernan, así como la decepción política que sufren los habitantes del centro del país, entre ellos los poblanos.


Durante su ponencia “México Político: La vista panorámica” en la Universidad de las Américas, Lorenzo Meyer vaticinó el regreso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a Los Pinos con el “huevito del dinosaurio” Enrique Peña Nieto, así como la representación de la mayoría en las cámaras de diputados y senadores.


El analista político lamentó que el PRI regrese al poder, gracias a la incapacidad de los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática, puesto que ambos están postulando candidatos de bajo perfil, aunque resaltó que el tricolor no se está esmerando en sus aspirantes.


En su participación en el Congreso de Derecho organizado por la Universidad de las Américas, Meyer Cosío se pronunció por anular el voto, en vez de entregárselo al tricolor, ya que éste partido carece de propuestas novedosas o de iniciativas para cambiar el rumbo del país.


El profesor emérito del Colegio de México explicó que las elecciones intermedias en México son las menos concurridas en su historia, y a ello, le sumó la falta de candidatos relevantes para ocupar una curul en San Lázaro propuestos por el PAN y el PRD.


“Se espera una elección desangelada (…) el desencanto se impondrá en las urnas el próximo 5 de julio”, comentó citando el estudio de “Conociendo a los ciudadanos mexicanos”, realizado por la Secretaría de Gobernación.


México, en comparación con otros países, sufre de la mínima credibilidad de sus ciudadanos con sus gobernados, por las acciones que han tomado en contra del narcotráfico y el nivel de penetración que ha tenido la delincuencia organizada en las corporaciones policiacas y en las procuradurías.


De acuerdo a las cifras oficiales sobre credibilidad en la política en todo el mundo, en México solamente 35 por ciento de los ciudadanos confía en las autoridades tanto policiacas como administrativas.


Al respecto, Lorenzo Meyer enunció los porcentajes que colocan a México entre los países con el índice menor en credibilidad política y hacia las autoridades: 20.3 por ciento no le cree nada a los gobernantes; 39.5 por ciento le cree poco; 27.9 por ciento regular y solamente 12.4 por ciento le cree mucho. Mientras que el tres por ciento aún no sabe si creerles o no.


Los bajos niveles de confianza y de credibilidad que tienen los mexicanos en sus gobernantes obedecen a la polémica elección de 2006, cuando Felipe Calderón se impuso sobre Andrés Manuel López Obrador por 200 mil votos.


“Es por ello que tan sólo en el 2006 la legitimidad de las elecciones quedó en entredicho, ya que la democracia mexicana cuesta mucho.”


Según el profesor emérito del prestigiado Colegio de México, son las universidades, el Ejército, la Iglesia y los medios de comunicación las instituciones con mayor confianza entre los ciudadanos.


En los puntos medios se encuentra la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Instituto Federal Electoral (IFE), la Presidencia de la República, los empresarios y los banqueros.


Y de acuerdo al estudio de la Secretaría de Gobernación, los peor calificados son los senadores, diputados, políticos, sindicatos y los partidos políticos.


Agregó que “Sólo 50 por ciento de los mexicanos apoya a la democracia porque la otra mitad no está convencido de que en México se viva una verdadera democracia (…)


“Nuestros conciudadanos piensan que el sistema mexicano no es una verdadera democracia porque el gobierno sólo favorece a una minoría y no al resto de la población.”

 

 

Copyright 2008 / Todos los derechos reservados para M.N Cambio /


 
 
Todos los Columnistas