A punto de perderse Chapulco por errores de planeación

Pese a la inversión de 85 millones de pesos que se realizó en el gobierno de Blanca Alcalá Ruiz

El alcalde Eduardo Rivera Pérez se olvidó por completo de ese parque y, hasta hace una semana, sus funcionarios tomaron la decisión de hacer un recorrido para ver las condiciones en las que se encuentra

Yonadab Cabrera Cruz

A casi un año de su inauguración la laguna de Chapulco se encuentra a punto de extinguirse, pues defectos de construcción del llamado Parque Centenario provocaron que actualmente el cuerpo acuífero cuente apenas con 70 centímetros de profundidad. Pese a la inversión de 85 millones de pesos que hizo la administración de Blanca Alcalá Ruiz para convertirla en el programa y obra emblemática de su gobierno, nunca se calculó correctamente el flujo de agua para la temporada de sequía, pero tampoco el riesgo en caso de una inundación en tiempo de lluvias.

A los defectos de construcción debe sumarse el abandono de la administración de Eduardo Rivera Pérez, quien a más de un mes de tomar el poder ni siquiera se ha preocupado por cambiar la señalética del parque que todavía luce los emblemas de “Capital a tiempo”.

Poco queda de la fastuosa inauguración del 3 de mayo del año pasado, puesto que ahora ni siquiera flotan los botes que se adquirieron para los paseos en la laguna y, poco a poco, empiezan a surgir más inconsistencias en la obra blanquista.

Pero también el alcalde Eduardo Rivera Pérez ha contribuido a que la laguna de Chapulco esté a punto de secarse, debido a que se olvidó por completo de ese parque, no le ha puesto la atención necesaria y, hasta hace una semana, sus funcionarios tomaron la decisión de hacer un recorrido para ver las condiciones en las que se encuentra, por lo que iniciarán un análisis sobre los proyectos que se podrían realizar para evitar que se seque el vaso acuífero y además buscarán enmendar todos los errores de planeación que cometió la exalcaldesa.

Tanto se ha olvidado Rivera Pérez de la laguna de Chapulco, que en el Centro de Educación Ambiental aún transmiten videos de Blanca Alcalá de la fecha cuando se inauguró el Parque Centenario, así como las recomendaciones que da la exalcaldesa para preservar ese ecosistema.

Los videos que se proyectan en el centro antes mencionado aún promueven la imagen de la exalcaldesa así como del exgobernador Mario Marín Torres, cuando se debieron retirar o cambiar desde hace más de un mes, cuando Rivera Pérez tomó posesión.

Mala planeación de Blanca Alcalá

Desde la planeación del proyecto hubo diversos errores u omisiones, uno de los más graves haber decidido darle dos metros de profundidad cuando en realidad tendrían que haber sido cuatro metros, por lo que ahora las sequías afectan más el nivel de ese vaso acuífero.

Además, con la misma agua de Chapulco se riega toda la flora que se encuentra alrededor, lo que ha provocado que disminuya aún más el nivel de esa laguna llegando a 70 centímetros de profundidad.

Por si fuera poco, como se trata de un corredor de agua es muy complicado que se puedan instalar bombas para abastecer la laguna, pero el ayuntamiento de Blanca Alcalá no previno las sequías que azotarían a la ciudad de Puebla, pues desde octubre del año pasado no llueve considerablemente y solamente existen algunos canales que se supone llevarían agua a la laguna de Chapulco proveniente de las colonias aledañas, pero los canales igual se encuentran secos.

De acuerdo a especialistas del Ayuntamiento, si desde un principio se hubiera desazolvado ese manto acuífero a cuatro metros de profundidad, las probabilidades de que la laguna se secara serían mínimas, así también se prolongaría la disminución del manto freático.

Los cuatro aireadores que se instalaron para evitar que el agua se estancara y se pusiera verde se descompusieron desde la administración de Blanca Alcalá y ya no fueron arreglados, por lo que tampoco hay manera de que el vital líquido tenga un cauce y circule normalmente.

Pero además el Ayuntamiento no tiene la certeza de que en época de lluvias no se inunden las colonias que se encuentran alrededor de la laguna de Chapulco, ya que la Dirección de Obra Pública adherida a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obra Pública, jamás entregó los proyectos y estudios que se hicieron para prevenir dichas inundaciones o alguna contingencia, esos estudios desaparecieron desde el gobierno de Blanca Alcalá, únicamente se construyó una compuerta para drenar el agua que esté de más en la laguna.

Incluso, los mismos trabajadores del Centro de Educación Ambiental, el cual se encuentra en la laguna, reconocen que el manto freático se encuentra a su mínima capacidad, pues de dos metros de profundidad ahora tiene solamente 70 centímetros, argumentando que se trata por la época de sequía, pero en cuanto empiecen las lluvias subirá el nivel a los dos metros.

En un recorrido que hizo CAMBIO por el lugar, se pudo observar un ecosistema a punto de extinguirse, ya que los patos y las aves en general caminan sobre los islotes y el suelo de la laguna. En las orillas hay fango, lodo y mosquitos, lo cual podría significar un riesgo para la salud de las personas que visitan ese parque ecológico.

Se aprecian peces muertos, además las lanchas no pueden ser usadas ya que no flotan y se quedarían varadas en el lugar, el agua no cubre los muros de protección para evitar que se inunden las zonas aledañas.

Todo por una mala planeación de la exalcaldesa de Puebla, ahora empiezan a surgir las deficiencias en los trabajos realizados para rescatar la laguna de Chapulco, e incluso en el parque que se edificó a su alrededor denominado Centenario se empiezan a encontrar diversas inconsistencias, por ejemplo, los sanitarios fueron cambiados debido a que se instalaron de manera incorrecta, no tienen agua y el gimnasio que también se instaló al interior del parque tuvo que ser removido, pues no contaba con los estándares de calidad requeridos.

La laguna de Chapulco cuenta con una extensión de 180 mil metros cuadrados, 72 mil 500 metros cuadrados de áreas verdes, para su recuperación trabajaron en conjunto el gobierno municipal, el gobierno federal y el del estado a través del SOAPAP.

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