Martha Erika placea a los dos favoritos


-Crónica-


Héctor Hugo Cruz Salazar


Si los hechos dicen más que las palabras, el favoritismo y buen trato que la primera dama de Puebla dio a Tony Gali y a Jorge Aguilar ayer, confirma que en la lista de favoritos del morenovallismo por la candidatura a la alcaldía capitalina ya sólo hay dos.


No hizo falta que Martha Erika dijera que son los mejores. Tampoco que les levantara la mano. Mucho menos que los destapara como aspirantes. La señal fue clara para aquellos que la sepan leer.


La presidenta del DIF estatal llevó a los dos funcionarios estatales a la Casa del Abue para placearse con la gente de la tercera edad, bajo el pretexto de participar en la premiación de un concurso de ofrendas.


A Aguilar Chedraui y a Gali Fayad les agradeció su apoyo para los “viejitos”. Al secretario de Salud por acercarles las caravanas de Puebla Sana, y al de Infraestructura por arreglarles su calle, lo que hizo que ambos fueran ovacionados.


No hizo falta que la primera dama dijera otra cosa. La señal fue lanzada.


Los hechos lo confirmaron.


El evento fue planeado para hacer lucir a los aspirantes al Charlie Hall.


Para acercarlos a los viejitos. Para que los conocieran.


Para que los escucharan y pactaran apoyos.


***


Tony Gali y Jorge Aguilar aprovecharon sus tres minutos de discurso para congraciarse con los abuelitos. Se ganaron su aplauso.


Gali habló de las obras de la gestión estatal y reveló que ya estaba analizando la de la Casa de la Juventud, que impulsa el DIF estatal. Además, reconoció la labor de Moreno Valle como el transformador de Puebla con dichas acciones.


Aguilar Chedraui no se quedó atrás y también resaltó los logros de su jefe el gobernador en materia de salud y de las acciones que se realizan a través del programa Puebla Sana, además presumió el trabajo cercano que ha hecho con el DIF y con los propios abuelitos.


El escenario fue bien aprovechado por los dos aspirantes, que mostraron una excesiva camaradería.


Hicieron sentir que se saben los favoritos de su jefe. Que en la competencia interna sólo quedan ellos dos.


Palmadas, fotos, charla, todo compartieron.


Intentando mostrar que no hay envidias ni diferencia entre los dos.


Para ellos tampoco hizo falta un mensaje, ni tampoco un reconocimiento, con los hechos quedaron más que servidos.




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