De acuerdo con la prensa local, el martes por la noche el matrimonio llevó a su hijo al hospital NYU Longone Medical, en Manhattan, porque estaba inconsciente. Sin embargo, el menor falleció media hora después.

El personal médico que lo atendió reportó la muerte a la Agencia de Protección Infantil de Nueva York debido a que el bebé presentaba hematomas en la espalda y rasguños en diferentes partes de su cuerpo, lo que despertó sospecha en los doctores.

La policía de NY fue notificada e interrogó al diplomático mexicano y su esposa, pero hasta el momento no ha presentado cargos en contra de ellos. Oficiales de las fuerza de seguridad declararon al diario Wall Street Journal que Rocha Bracamontes sólo tiene inmunidad en el ejercicio de sus funciones y que el apartamento donde vive la pareja ha sido acordonado para que se lleven a cabo las investigaciones.

Por su parte, el Consulado de México en Nueva York dijo por medio de un comunicado que permanece en contacto con las autoridades locales y, en conformidad con el derecho internacional, se le dará asistencia y protección a su funcionario.

Rocha Bracamontes y Ximena Ovalle explicaron a la policía que su hijo padecía epilepsia y que por esta razón presentaba moretones en la espalda, además que los rasguños él mismo se los pudo haber provocado.

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