Por primera vez en seis años, La Ciudad de las Ideas se llevará a cabo en medio de una polémica ajena a sus ponencias, tras las críticas lanzadas por los periodistas León Krauz y Carlos Puig —ambos, columnistas de Milenio— al organizador, Andrés Roemer, por su doble papel como cónsul de México en San Francisco y organizador del festival de las mentes brillantes.
El festival denominado en este año Dangerous ideasarranca este jueves y durará hasta el próximo 9 de noviembre, en el que participarán 70 ponentes y más de 3 mil asistentes por día.
Uno de los grandes atractivos del encuentro es el debate que sostendrán Deepak Chopra, el famoso doctor y conferencista hindú, autor de más de 75 best sellers, con Richard Dawkins, miembro exclusivo de la Fellow of the Royal Society, programado para el último día.
Según los organizadores, se trata de “dos de los más grandes protagonistas del pensamiento universal”, por lo que no dudan en calificarlo como "el encuentro del siglo".
Otra participación destacable es la de Alain de Botton, creador de la Escuela de la Vida, autor de los libros La ansiedad del estatus, La arquitectura de la felicidad y Cómo pensar más en sexo, entre otros, quien por primera vez visita México.
El gobierno estatal busca con este tipo de actividades captar una importante derrama económica ante la presencia no sólo de especialistas en diversos temas, sino también de interesados en escuchar las participaciones.
Lejos del programa de este encuentro, el curador es considerado por ambos columnistas como alguien que “aprovecha” su puesto como cónsul “para hacer turismo eventual”, pues critican el hecho en que se ha entretenido con la organización de La Ciudad de las Ideas como una forma de responder al otro trabajo que tiene con Grupo Salinas (patrocinador del evento) y ha desatendido su trabajo como cónsul.
“Esta confusión entre el servicio público y el negocio privado, esta afición por ignorar el conflicto de interés o servirse de un cargo público es una costumbre muy mexicana, semilla de nuestra endémica corrupción”, según Puig, quien escribió ayer desde su columna Dudas Razonables, sobre el tema bajo el título Las confusiones de Roemer y del canciller Meade.
Las primeras críticas sobre el tema fueron lanzadas primero por León Krauz, quien criticó la designación de Roemer como cónsul y que no esté trabajando en ello por organizar el encuentro de la La Ciudad de las Ideas.
Finalmente, Andrés Roemer ha buscado defenderse con asegurar que ha sostenido una serie de reuniones de trabajos relacionados con su trabajo como cónsul en San Francisco.
