A cien días del gobierno de Enrique Peña Nieto nada ha cambiado para disminuir la violencia hacia periodistas, pues en lo que va de 2013 ha desaparecido una periodista, dos reporteros han sido asesinados y también ocurrió la muerte de un civil, detalló Armando Castilla, vicepresidente de la Comisión de la Libertad de Prensa e Información en México, durante el informe de los altos índices de violencia que hay en el país ante la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Además de la reforma al artículo 73 fracción 11 de la Constitución y la promulgación de la nueva ley para protección de periodistas ante los de derechos humanos, en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa se destinaron 42 millones de pesos a la protección de familiares de periodistas amenazados de muerte por el crimen organizado. Ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos sólo se registraron 43 casos.
Actualmente se espera un fondo de 129 millones de pesos para el gobierno de Enrique Peña Nieto destinado a la protección, aunque el consejo no ha utilizado parte de este recurso. El gobierno federal no ha emitido un pronunciamiento oficial para “el pacto y poca ley para la protección ante los derechos a periodistas”.
Al finalizar el informe de Armando Castilla, el moderador Claudio Galvillo, procedente de Uruguay, expresó: “después de escuchar el violento, sangriento y horroroso informe, no por como está escrito sino por la situación en México, uno entiende por qué el Presidente de la República no quiso venir a la asamblea”.
Tomando en consideración a México para recibir ayuda para la protección a la libre expresión y protección a periodistas por parte de la SIP, periodistas de Latinoamérica en la asamblea pidieron no dejar solo a México. En México hay más víctimas de homicidio a periodistas y civiles por el narcoterrorismo en América Latina.
Juan Lauro Aguirre, un ciudadano que pagó para asistir a la asamblea, dio a conocer la desaparición de su sobrino de 14 años hace dos años: “en marzo de 2011, tras una salida al cine, mi sobrino y sus amigos fueron llevados por narcotraficantes por estar en el lugar equivocado. Ustedes (refirió a miembros de la SIP) están fuera de nuestras fronteras, están protegidos, pueden hablar más libremente que los que viven día a día el narcoterrorismo”.
Posteriormente, Alejandro Miró Quesada, periodista de la revista Cosas, procedente de Lima, Perú, pidió se destinen recursos para la protección a periodistas en México.
