Tenía once meses, estaba deshidratado y a punto de morir en un basurero de India. A la sudafricana Joanne Lefson algo le llamó la atención, sintió demasiada empatía. Y lo adoptó. Lo sometió a una dieta de proteínas. Duplicó su peso. Un tiempo después, se convirtió en un perro diferente. Rupee se convirtió en el primer can en escalar el Everest.
Según informó la agencia AFP, el perro y su dueña, una exgolfista profesional, empezaron la expedición al Monte Everest el 14 de octubre. El objetivo fue formar parte de una campaña de sensibilización sobre la causa de perros sin techo para promocionar la adopción de animales.
"Estoy tan orgullosa de Rupee. Pensé que lo tendría que llevar en brazos algunos días, pero en lugar de eso, fue él el quien tomó el liderazgo y tiró de mi", dijo Joanne Lefson. La base del campamento a la que alcanzó Rupee está a 5.364 metros.
"Le encantó la nieve, se la comió, jugó con ella, si lo hubiera dejado, se hubiera dormido ahí", dijo. La experiencia fue sorpresiva para todos y tanto los monjes hindúes o los niños de la ciudad himalaya de Namche Bazaar se sacaron su foto con Rupee.
"Espero que su logro genere que la gente sea más amable con los animales, en particular con los animales callejeros. Deben tomar conciencia de que cada vida cuenta", afirmó la dueña de Rupee.
