Jennifer Lawrence, confesó que una vez fue descubierta por la camarera de un hotel con una caja de consoladores.
"Hace unos días, estaba en un hotel y recibí de regalo una caja llena de consoladores. Obviamente era una broma, pero momentos después de abrirla, entró la camarera y tuve que esconderlos rápidamente bajo la cama", explicó.
La actriz dijo que al regresar a su habitación, los juguetes sexuales estaban perfectamente acomodados, sobre una mesa junto a la cama.
"Cuando me fui sentí tanta vergüenza, que me dieron ganas de dejar una nota sobre la mesa para explicarle a la empleada que los consoladores no eran míos", agregó.
De acuerdo con Huffington Post, Jennifer confesó esto durante una entrevista, en el programa televisivo de Conan O´Brian.