Fue el mayor choque de fuerzas visto en Tehuacán en décadas recientes.

Por un lado el entonces subsecretario de Desarrollo Social Juan Carlos Lastiri Quirós se empecinó, aún más, se obsesionó, en imponer a su “capricho” como candidata a diputada federal. Las voces al unísono repetían que era una inútil imprudencia, un burdo exceso, la demostración de un apetito banal.

Pero para consumar su antojo Lastiri fue capaz de llevar a Rosario Robles Berlanga a Tehuacán acomer Mole de Caderas en una mesa del Club de Empresarios. Con el aval de la titular los recursos de los programas federales se volcaron de manera descomunal, titánica.

En su momento, el matrimonio que controla el Ayuntamiento de Tehuacán: Ernestina Fernández Méndez y Álvaro Alatriste Hidalgo, expusieron que no les parecía el proyecto de Lastiri y que esperaban que su partido, encabezado por Ana Isabel Allende Cano respaldara a su alfil Jesús Amador Hernández Barbosa. Una y otra vez se hizo la petición. Llegaron al grado de movilizar autobuses con cientos de militantes para exigir que no se consumara el capricho de Lastiri.

Pero todos los reclamos fueron ignorados. Se impuso la voluntad de Juan Carlos y esto llevó al tricolor tehuacanero a su más grande fractura.

Jesús Hernández se fue como candidato independiente; Jacobo Aguilar Sánchez (ex presidente del Comité Municipal del PRI) fue ungido candidato del PRD; Guicho Cobo Velasco (quien tuvo cercanía con el PRI) fue el abanderado de Nueva Alianza; incluso figuras menores pero con militancia priista se fueron a otras tribunas como Guadalupe González Beristain, quien contendió bajo los colores de Movimiento Ciudadano e Irene Trujillo quien encabezó al Partido Humanista.

Una verdadera desbandada provocada por los caprichos de Juan Carlos Lastiri.

El caótico escenario sólo allanó el camino del morenovallista Sergio Gómez Olivier quien ganó con una holgada ventaja de 2 a 1 sobre la candidata del PRI.

Pero para el Directivo Estatal que preside Ana Isabel Allende Cano quedó claro que no se puede conducir una contienda sin el apoyo del segundo Ayuntamiento de la entidad. Por esta razón, en días pasados y luego de aquel agudo desencuentro, el matrimonio Alatriste se reunió en privado con Ana Isabel. Ahí acordaron entregar el Comité Municipal a una figura que fue propuesta por la alcaldesa y su esposo. Luego se realizó una comida a la que fueron convocados los grupos representativos, los cuadros distinguidos, la crema y nata del tricolor tehuacanero.

Aquellos ásperos rozones, los choques frontales y las recriminaciones del pasado proceso electoral quedaron olvidados.

Esto representa que la Comuna tendrá un factor decisivo en el proceso electoral de 2016, que en los pasillos del Palacio Municipal se deberán resolver variados temas electorales.

Sin duda para Ana Isabel esta alianza es toral. Y para los Alatriste también.

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.