El gobierno de José Juan Espinosa Torres, confirmó que ya adquirió dos hectáreas de predio para reubicar el penal regional, cuya inversión calculada, asciende a 150 millonesde pesos, el cual se situaría en los límites con San Andrés Calpan, cerca de donde se adecuará el relleno sanitario intermunicipal.

En entrevista con el secretario de Gobernación, Luis Alberto Arriaga Lila, evitó dar a conocer la cantidad que erogó la administración para la compra de los terrenos, por lo que tan sólo recordó que es con el fin de trasladar a otro sitio los cerca de 700 internos.

“En condiciones como las que se encuentra la cárcel de Cholula, no existe la readaptación, existe el hacinamiento y estamos muy preocupados por el tema (…). El hacinamiento es espantoso, son condiciones de vida infrahumanas, son cuestiones que no podemos permitir en el respeto a los derechos humanos”, dijo Arriaga.

Dejó en claro que los terrenos ya están listos para ser usados inmediatamente, pero reconoció que aún faltan los recursos.

La capacidad real que tiene el penal de Cholula es de 147 personas, sin embargo, en los últimos años se ha incrementado 451 por ciento, por lo que en la actualidad da “posada” a 663 internos, de los cuales 608 son hombres y 55 mujeres, según datos del propio Ayuntamiento y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

Cabe citar que el gobernador del estado, Rafael Moreno Valle, ha declarado desde hace meses, que no se contempla construir ningún centro penitenciario para resolver la situación de los existentes en Cholula, Huejotzingo y Tepeaca, donde hay hacinamiento, insalubridad, violaciones a los derechos humanos, e inseguridad.

El 15 de mayo pasado, el Cabildo que conforma el gobierno de Espinosa Torres, aprobó iniciar el procedimiento administrativo para entregar en comodato este inmueble, con todo y sus presos, al gobierno de Rafael Moreno Valle, para que éste sea quien lo opere y le dé mantenimiento, pero el estado se negó.

Dicha cárcel no sólo alberga a ex líderes sindicales como Israel Pacheco, activistas como Adán Xicale, policías en desgracia y feminicidas como Manuel Forcelledo Nader, sino también a personajes ligados con la delincuencia organizada.