El director del Instituto de Ciencias Jurídicas de Puebla (ICI), Germán Molina, consideró que la aprobación y eventual ejecución de un mando unificado de seguridad en Puebla, deberá de ser discutido después de la coyuntura política del 2016 y evitar que sea usada con fines electorales.

Del mismo modo dijo que la propuesta que ha hecho el ejecutivo estatal es una medida autoritaria pues deja sin autonomía a los municipios, sin embargo consideró que el problema de la inseguridad en localidades conturbadas y juntas auxiliares, es un reflejo de la desatención que el morenovallismo ha tenido.

“No podemos culpar solamente a la policía municipal porque es una policía deficiente, los presidentes municipales tienen cuerpos de seguridad improvisados, no tienen el armamento, no tienen la capacitación, no manejan protocolos para este tipo de situaciones (…) aquí lo que falló fue la coordinación de las fuerzas federales”, dijo.

Del mismo modo agregó que esta capacidad de organización sí existe en las corporaciones de seguridad en el estado cuando se trata de bloquear marchas o reprimir protestas de grupos disidentes, sin embargo para prevenir linchamientos o para brindar seguridad conjunta a los pobladores, las corporaciones son ausentes o se muestran inoperantes.