El alcalde de Cuautlancingo Félix Casiano Tlahque confirmó que el relleno sanitario municipal, ubicado sobre la calle Camino Real México-Puebla sigue activo, pero como un tiradero de escombros.
En entrevista, rechazó que el Ayuntamiento esté desechando en ese lugar y aseguró que es un particular “quien está operando el depósito como tiradero a cielo abierto", minimizando de esta forma, el foco rojo que representa.
Este tiradero fue clausurado en la administración de Refugio Sarmiento, hace casi una década por poner en riesgo los mantos acuíferos y rebasar su capacidad, y por un tiempo fue ocupado por el gobierno de Huejotzingo.
Según vecinos de este sitio, al lugar llegan camiones de volteo a tirar residuos e incluso, el representante del Comité por la Defensa del Agua y la Tierra en Coronango, Daniel Oropeza, reveló que en ese tiradero de basura, la polémica empresa Rassini está confinando desechos tóxicos.
"Como Rassini ya no pudo tirar en Coronango, se llevó sus desechos tóxicos a Cuautlancingo. Los echa en la noche para que la gente no se dé cuenta y se manifieste como en Coronango”, indicó.
Recordó que especialistas de la BUAP han realizado estudios a los desechos de la fábrica Rassini, concluyendo que son altamente tóxicos.