Renata Valentina llevaba apenas dos semanas asistiendo a la guardería Pequeños Triunfadores, perteneciente a la red de estancias infantiles de Sedesol, hasta que la tarde de ayer su madre fue notificada que la pequeña había fallecido mientras tomaba su siesta, aunque el dictamen de la necropsia arrojó que la menor había sido desnucada.
Hija única y de madre soltera, Renata era una de los doce infantes inscritos en dicha instancia de la colonia Alseseca en la modalidad particular, es decir, no recibía la beca de 900 pesos mensuales que la Sedesol provee a las madres y padres solos que están afiliados a la red, según informó el delegado Juan Manuel Vega Rayet.
Tras recibir el llamado del personal de la gurdería para informarle de lo ocurrido, su madre llegó acompañada de otro familiar para entrevistarse con los paramédicos que revisaron a la pequeña de 18 meses de nacida, los cuales le informaron que la menor posiblemente había broncoaspirado y que las empleadas de la estancia expusieron que pudo haber sido con sus flemas.
De inmediato los familiares de la pequeña Renata negaron esto debido a que señalaron que la niña no estaba enferma ya que de haberlo estado, no la habrían recibido para evitar un contagio en el resto de los niños.
La mañana de este jueves, el resultado de la necropsia confirmó la negligencia, la menor no había broncoaspirado y mucho menos con sus flemas. Renata Valentina en realidad había fallecido por una luxación occipitoatloidea en la union del cráneo y el cuello, la cual se pudo producir por una hiperextension o estiramiento exagerado del cuello.
De acuerdo con técnicos en medicina, este tipo de lesiones en una menor pudieron provocarse por una caída o un movimiento muy brusco, sin embargo hasta el momento se desconoce quién pudo haberle causado esta lesión a la pequeña Renata, mismo que estaría siendo encubierto por la encargada de la estancia, Ana Laura Méndez Popoca.