La familia de Juan Pedro Garrido Juárez confirmó que su familiar es señalado como el presunto homicida del periodista Aurelio Cabrera Campos,pero cuestionaron la labor de las autoridades ministeriales al tardar casi una semana para proceder a la detención del director de La Voz de la Sierra a pesar que aseguran en la Carpeta de investigación que la víctima logró identificar a su agresor antes de morir.

La hermana de Juan Pedro, Evelin Garrido Juárez explicó en entrevista para CAMBIO que otra irregularidad en el caso es que los tres mandos ministeriales que han encabezado las diligencias, son los mismos que han sido exhibidos constantemente por el medio de comunicación de su familia y por Aurelio Cabrera por supuestas corruptelas.

A 72 horas de que Juan Pedro se sustrajo de la justicia junto con su padre Pedro Garrido Cuevas, Evelin reveló que existe preocupación en el seno familiar ya que al no tener comunicación con ninguno de los dos, temen que hayan corrido con la misma suerte de Aurelio Cabrera debido a que consideran que el caso viene de una vendetta política.

El socorrista que acusa a Juan Pedro es Policía Federal

Evelin destacó que uno de los elementos que ponen en entredicho la credibilidad de la versión que ofrece la Fiscalía General del Estado (FGE) es que en un primer momento la investigación se sustentó en que un supuesto paramédico de Cruz Roja que atendió a Aurelio la noche del 14 de septiembre tras ser baleado, posteriormente resultó ser elemento de la Policía Federal.

Dicho testigo que responde al nombre de David Sampayo Vargas, asentó en declaraciones integradas en la Carpeta de Investigación 751/2016/Huauchinango que como primer respondiente del atentado mortal contra Aurelio Cabrera, la víctima alcanzó a dar el nombre de su agresor y las señas de la unidad en la que viajaban, mismas que corresponden a Juan Pedro y a su camioneta Nissan Titán color gris que es usada para repartir el semanario.

“Si en verdad hubiera sido Juan Pedro, hubiera sido bien fácil comunicarse con las autoridades policiacas, implementar en ese momento un operativo y así sí Juan Pero hubiese cometido el delito, en ese momento te detienen y te vas al bote porque en ese momento hay un indicio de que tu cometiste el homicidio, pero no te esperas casi una semana”, señaló Evelin Garrido.

Agregó que la noche del 19 de septiembre los agentes ministeriales llegaron a las oficinas de La Voz de la Sierra en Privada Xochipila 86 esquina con la calle Porfirio Díaz en Xicotepec, sin pruebas en contra de Juan Pedro dado que nuevamente se hizo una revisión en la casa, buscándolo no sin antes destrozar las cámaras de seguridad, permitiendo una posible “siembra de pruebas”.

Ministeriales exhibidos por La Vozahora investigan el caso

El comandante de la policía ministerial regional, Florencio Rodríguez Vázquez; el jefe ministerial de Xicotepec, Adolfo Zamudio Guzmán, y el comandante del Grupo Huauchinango, Miguel Hernández Romero, son los tres mandos que se encuentran a cargo de la investigación en contra del periodista Juan Pedro Garrido, quien en su medio los ha acusado en múltiples ocasiones de corruptelas y malas prácticas.

“Los mandos ya han sido exhibidos por La Voz de la Sierra y es increíble que ahora sean curiosamente ellos quienes encabecen las diligencias con toda la saña que pueda existir en contra de mi hermano –Juan Pedro– y de mi padre –Pedro– quienes junto con el difunto –Aurelio–, los exhibieron desde hace casi diez años por corruptos”, señaló Evelin.

Temen que Juan Pedro también sea asesinado

Señaló que a pesar que no ha sido detenido, temen que no se ha ubicado pronto por las autoridades o que se reporte con ellos ya que tras casi 72 horas de no saber del paradero de Juan Pedro ni de su padre, temen que les pueda pasar lo mismo que Aurelio.

“Lo que menos quiero es que mañana me digan que encontraron a mi hermano en los límites de Puebla y Veracruz en las mismas condiciones que Aurelio, porque si uno ve la violencia con la que hicieron el operativo del lunes, es evidente que querían darle una ‘madrina’ a Juan Pedro”, consideró.