Empresarios de la Canaco y Coparmex consideran que los 210 policías encubiertos que vigilarán el transporte público también son vulnerables a ser asesinados por los asaltantes, por lo que no creen que la medida que implemente el gobierno estatal y municipal solucione de fondo la problemática de los asaltos.
Luego de que el alcalde de la capital, Luis Banck Serrato y el secretario de Seguridad Pública estatal, Jesús Rodríguez Almeida anunciaran que con la adición de 150 policías más a dicha estrategia, serían 210 los uniformados que protegerían a los usuarios, los inversionistas opinaron que se trata de una estrategia temporal.
Entrevistados por separado para CAMBIO, los presidentes de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Marco Antonio Prósperi y de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Antonio Quintana consideraron que aunque es una medida benéfica para la seguridad de los ciudadanos, los policías también podrían ser víctimas al ir vestidos como civiles.
“La posibilidad de que ellos sean asaltados existe, pero es necesaria para terminar de descubrir quiénes son e ir desmantelando estas bandas”, expresó Antonio Quintana.
Aunque el presidente de Coparmex afirmó que es una estrategia bien recibida, lamentó que la situación de la inseguridad en Puebla implique que la gente tenga que cuidarse en el servicio de transporte público.
“Vemos lamentable el hecho que tengamos que cuidarnos en un sitio público, el hecho de que esté aumentando la percepción de la seguridad en la ciudad, pero que se tome esta medida y que el mismo alcalde haya ido a recibir la opinión de las personas que viajan en esas rutas lo vemos muy positivo”, comentó el presidente de Coparmex.
En tanto, el presidente de Canaco secundó la postura del presidente de Coparmex al indicar que ante un hecho de violencia, los policías encubiertos no podrán hacer nada.
“Desde el viernes salió un estudio que indica que más del 70 por ciento de los poblanos tenemos la percepción de que vivimos en un lugar inseguro, esto es muy grave y es cierto; no sólo es un tema de percepción, sino que en Puebla está creciendo la inseguridad”, aseveró.
Sugieren otras estrategias
Ambos sugirieron al Gobierno del Estado y al municipio a emprender otras medidas como la instalación inmediata de botones de pánico, cámaras de videovigilancia, además de explorar los casos de éxito en materia de seguridad que han implementado otras ciudades del país.
“Hay que ver todos los casos de éxito de otras partes del mundo para ir bajando estos índices de inseguridad”, concluyó Prósperi.