En un ambiente hediondo y altamente tóxico viven decenas de familias que rodean las tres represas que construyó la administración pasada, supuestamente para evitar las inundaciones en Cuautlancingo. Se trata de tres vasos reguladores, cuya inversión ascendió a más de 70 millones de pesos y a los cuales no se les ha dado mantenimiento desde hace cinco años.

En un recorrido por la represa ‘20 de Noviembre’, lugareños revelaron a CAMBIO Regionales que las 20 familias que la rodean, ya han sido intoxicadas y presentan padecimientos gastrointestinales y en la piel.

Los quejosos, aseguraron que, pese a que han requerido la intervención del Ayuntamiento encabezado por Félix Casiano, sólo les ha mandado a decir con sus ‘empleados’, que tapará los vasos reguladores que construyó su antecesor, Filomeno Sarmiento Torres.

Adelantaron que presentarán ante las autoridades competentes una denuncia formal, por el daño a la salud pública, y para ello, contrataron a ambientalistas y especialistas, para analizar los elementos tóxicos y agentes patógenos que contiene el agua de la represa ‘20 de noviembre’, la cual rebasa su capacidad.

Además de ésta, el municipio cuenta con dos más ubicadas en la calle Margaritas.

Los afectados

María de Jesús Nolasco, quien vive a espaldas del colector, se dijo molesta y frustrada, por la ineptitud del alcalde, y aseguró que las represas se han vuelto cementerio de animales muertos, relleno sanitario y tiradero de llantas.

Martha Peralta, vecina de la Prolongación 20 de noviembre, mencionó que la salida del agua de las represas se encuentra obstruida por la basura. Alertó que el agua sucia, desemboca en el Río Rabanillo.

En la calle Hidalgo, Mario Pérez se pronunció en el mismo sentido que sus vecinos, y exigió al Ayuntamiento la limpieza de las represas.

Revelaron que los pozos artesanales, de dónde consumen agua los lugareños, también podrían estar contaminados por los desechos de las represas, los cuales ya habrían invadido los mantos acuíferos.

Agrupación solventará investigaciones de agentes tóxicos y patógenos

Tonatiuh Cuazitl, representante de la agrupación ‘Bosques 2030’, y afectado por la represa ‘20 de Noviembre’, exigió que se implemente en el Plan de Desarrollo Urbano las medidas necesarias para poner orden en la infraestructura para un sistema de aguas pluviales, saneamiento y la recolección de basura.

Reveló que ‘Bosques 2030’ solventará los gastos de los laboratorios y ambientalistas, que investigarán los agentes tóxicos y patógenos que circulan en las represas del municipio, ante el nulo saneamiento desde su creación.

Opinó que se trata de ‘elefantes blancos’, los cuales costaron mucho al municipio, y a la larga no resolvieron los problemas de inundaciones.

Adelantó que, de manera preliminar, los especialistas que han recorrido las represas, y se han entrevistado con los afectados, advierten de la presencia de peligrosas bacterias que podrían encontrarse, tales como klebsiella que ataca el tracto urinario, y pseudomonas y shigella, ocasionadas por los desechos fecales humanos y de animales.