Pese al rechazo que han mostrado en los últimos días los habitantes de Coronango y Cuautlancingo por la reforma para entregar al Estado la administración del agua, la mayoría de los regidores y los alcaldes; Félix Casiano Tlahque y Hermelinda Macoto Chapuli, respaldan la medida.
Por separado, sólo cuatro regidores de ambos gobiernos protestaron acompañados de la población y exigieron a sus respectivos ediles retractarse y no autorizar dicha reforma constitucional al artículo 12 que abre las puertas a la privatización del agua potable en los municipios.
Por la mañana, los regidores de Migración y Hacienda de Cuautlancingo, Rafael Ramírez Hernández y Eduardo Xicoténcatl, ofrecieron una conferencia de prensa en la capital, acompañados de algunos habitantes inconformes. Los concejales acusaron hace un par de semanas que el edil sometió en cabildo la aprobación de dicha reforma, la cual fue pospuesta para mayor análisis.
Ramírez Hernández mencionó que los regidores están preocupados e incluso están pensando en rechazar la reforma, pues han recibido solicitudes por escrito de habitantes que piden al edil no permitir la privatización del agua de Cuautlancingo.
En tanto, en Coronango, habitantes, grupos de profesionistas y algunas organizaciones civiles, exigieron a Hermelinda Macoto, que someta a consulta pública la aprobación de dicha reforma.
Desmintieron a la alcaldesa, quien hace unos días dijo a los medios de comunicación que en Coronango, aún no aprobaban la reforma para entregar al gobierno estatal la administración del servicio de agua potable.
En su oportunidad, el regidor de Obras Públicas; José Toxqui Coyotécatl, reveló que luego de un cabildo fallido, seis de ocho regidores, así como el síndico y la presidenta, dieron su voto a favor de la reforma. Por ese motivo los habitantes exigieron una sesión de cabildo pública, para el próximo viernes, en donde la alcaldesa y los regidores se retracten de lo que aprobaron el pasado 20 de enero.